En países desarrollados ha disminuido la mortalidad por cáncer de mama gracias a la detección en etapas tempranas y por la disponibilidad de tratamientos cada vez más específicos de biología molecular. Estados Unidos reporta un descenso de 3 por ciento y la estabilización en el número de casos diagnosticados, indicaron los especialistas Ernesto Sánchez y Carlos Sánchez.

Los expertos son autores del libro Cáncer de mama. Actualidades y controversias, en el cual advierten sobre los cambios que ha habido en el tumor maligno en aspectos como los métodos de diagnósticos y los medicamentos. Por estos y otros factores, señalaron, hablar de la cura está cada día más cercano, pero también es más complejo por lo que existen otras posturas que ven a esta neoplasia como un padecimiento de control a largo plazo, como ya ocurre con algunas que se detectan en estadios tempranos.

En México, el de mama es, desde 2006, la principal causa de muerte por cáncer en la población femenina y la incidencia del mal se incrementa con la edad. Al año se registran alrededor de 15 mil nuevos casos y más de 5 mil decesos. De acuerdo con datos aportados en el libro, la edad promedio de diagnóstico es de 52.7 años.

Al respecto, Maricarmen Forgach, directora del Grupo Pro Salud Mamaria (Prosama), resaltó que aunque las instituciones hacen lo más que pueden para dar a las pacientes lo necesario, no son suficientes. Algunos medicamentos no están incluidos y todavía se enfrentan deficiencias.

Agregó que la mayoría de las pacientes se diagnostican en etapas avanzadas y todavía transcurren varios meses desde que llegan a los hospitales hasta que pueden comenzar el tratamiento.

En conferencia, la activista comentó que en el país la mortalidad por el tumor mamario creció 14 por ciento en la pasada década.

De ahí la importancia de insistir en la prevención y la detección oportuna del mal, indicó. Prosama trabaja en esta área y en apoyo de mujeres de escasos recursos económicos, que son las que enfrentan las mayores dificultades de acceso a los servicios médicos y a las terapias.

La institución se enfoca principalmente en apoyar a las pacientes con estudios de detección de bajo costo y la compra de medicamentos.

Forgach se refirió a los servicios que reciben las afiliadas al Seguro Popular, el cual desde 2007 absorbe los gastos de los tratamientos. Es una maravilla, pero no alcanza. Los gastos son elevados, apuntó.

Mencionó también que los servicios de salud se encuentran saturados y se refirió, en particualr, al Hospital de la Mujer, donde los pasillos al aire libre ya se han sido habilitados como salas de espera, porque ya no caben.