El Partido Verde Ecologista de México (PVEM) deberá pagar otros 88.5 millones de pesos por realizar una operación inmobiliaria ilegal para compensar un pago ocultado al Instituto Nacional Electoral (INE) de cientos de miles de camisetas que nunca recibió, trama en la que estuvieron involucrados los hermanos Adrián y Arturo Escobar y Vega.

El tema llegó planchado al Consejo General del INE, al aprobarse ayer por unanimidad la imposición de otro castigo al Verde, que ya rebasará 600 millones de pesos en multas, sobre todo por cometer casi una veintena de violaciones a la norma electoral en los pasados comicios.

La compleja historia sobre esta investigación comenzó en 2010. Al entonces Instituto Federal Electoral (IFE) le despertaron dudas una serie de pagos del Verde por unas escrituras de las que no había evidencia. Finalmente halló que eran de un inmueble escriturado a nombre de Marco Antonio de la Mora Torreblanca, ex dirigente del PVEM en Guerrero y suplente de Arturo Escobar en la legislatura pasada de la Cámara de Diputados.

El predio ubicado en la delegación Iztapalapa se dio a cambio de 763 mil 599 camisetas no entregadas, por las que se pagaron 11.2 millones de pesos a la empresa Grupo Textil Joad, de la que era accionista Adrián Escobar, hermano del ex vocero del Verde Arturo Escobar.

Maquinación para defraudar

Se utilizaron varios adjetivos para definir esta trama: maquinación para ocultar a la autoridad electoral una serie de infracciones, expresó Pamela San Martín. Mientras el presidente de la Comisión de Fiscalización, Ciro Murayama, concluyó que hubo dolo por la pretensión de engañar a la autoridad.

En la sesión del consejo, Horacio Duarte, representante de Morena, hizo ver que no es la primera ocasión en que los hermanos Adrián y Arturo Escobar “están inmiscuidos y se confabulan en actividades ilícitas en materia electoral y de delincuencia organizada.

Un analista lo ha llamado el partido canalla. Jorge Alcocer se ha quedado corto. No sólo es canalla, es violador de la ley, expresó.

Pablo Gómez, representante del PRD, criticó la tardanza del otrora IFE que durante cuatro años guardó esta investigación al encubrir al oficialismo, que es una de las peores lacras de esta institución.

Reconoció a las actuales autoridades de fiscalización por haber desempolvado esta indagación antes de que prescribiera y de poner sobre la mesa un nuevo escándalo del Partido Verde.

Para mí la trama no es de 2009, sino que es la misma de 2008. Quiero pensar que esas camisetas nunca se entregaron ni en 2008 ni en 2009. Lo que se hizo en 2008 se quiso repetir en 2009 y si esto es así alguien le está robando al Verde y es su principal dirigente, afirmó en relación con Arturo Escobar.

También señaló como integrante de esta operación ilícita a Adrián Escobar, hermano del ex vocero del partido, que era dueño de la empresa Rabokse, mediante la cual dicho partido contrató propaganda en los cineminutos.

El que maneja eso es Escobar, que aparece acá de textilero. Se ve que está en negocios vinculados con su hermano, esta trama de las camisetas debe tener mucho más, expresó.

Jorge Herrera, representante del PVEM ante el Consejo General, intentó defenderse de sus críticos: desoiremos las calificaciones vertidas. Denigran más a quien las dice que a quienes se las dedican.

Y se quejó de que hubo documentos apócrifos en la investigación realizada en su momento por el ex titular de la Unidad de Fiscalización del INE Alfredo Cristalinas, además de que el Verde tampoco tuvo acceso al expediente, sino a información parcial.