La Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) y vecinos cuentan con registros de por lo menos 29 casos de desalojos violentos de viviendas en la delegación Cuauhtémoc, los cuales han afectado a alrededor de mil 780 personas de las colonias Roma, Centro, Condesa, Peralvillo, San Rafael, Guerrero, Buenavista y Santa María la Ribera.

De acuerdo con la diputada Dunia Ludlow Deloya, presidenta de la Comisión de Vivienda de la ALDF, tan sólo en 2015 contabilizaron 12 expulsiones, la mayoría de las cuales se ejecutaron con violencia, de manera intempestiva por la madrugada, con excesos de las fuerzas policiales, involucrando en ocasiones la participación de grupos de choque, sin claridad jurídica de los procedimientos y con atropello de los derechos humanos de los afectados.

La escasez de vivienda, el encarecimiento del suelo y la especulación inmobiliaria –dijo la legisladora local del PRI– están generando la multiplicación del número de desalojos. Muchos de esos casos afectan a personas de grupos vulnerables, adultos mayores y familias que no cuentan con recursos suficientes para pagar un lugar digno donde vivir.

En entrevista, destacó que cuando asumió el cargo –en septiembre pasado– una de las primeras reuniones que tuvo fue, precisamente, con un grupo de 123 personas que fueron desalojadas, sin previo aviso, de una vivienda de la colonia Roma, acción en la cual participaron policías del estado de México.

A partir de ahí, y junto con el diputado de Morena José Alfonso Suárez del Real, nos pusimos a investigar cuántos de estos casos había, y llegamos a registrar 23. Son de los que supimos, pero pueden ser muchos más, porque también se están dando en otras delegaciones, expresó.

Vecinos de la colonia Santa María la Ribera –quienes pidieron el anonimato ante el riesgo de represalias– aseguraron que en los pasados dos años integrantes de Asamblea de Barrios, Patria Nueva y Frente Revolución se apoderaron por la fuerza de edificios y casas ubicados en esa colonia, para lo cual tienen la protección de autoridades del gobierno capitalino y de la delegación Cuauhtémoc.

Armados con palos –detallaron– irrumpen en los inmuebles a cualquier hora del día, porque saben que ninguna patrulla actuará, y colocan en las fachadas mantas de que están protegidos por esas organizaciones.

Hasta ahora, dijeron, son seis los casos de edificios desalojados e invadidos, entre ellos los de Doctor Átl esquina Alzate; Sabino casi esquina Díaz Mirón; Torres Bodet y Alzate; Eligio Ancona y Mariano Azuela. Se trata de lugares abandonados, intestados o que eran rentados y al morir el dueño se quedan con ellos, lo cual aprovechan las huestes de Vicky Hernández, de Asamblea de Barrios, y Jesús Rico, de Patria Nueva, aseguraron los vecinos entrevistados.