Los senadores del Partido Acción Nacional (PAN) José María Martínez, Víctor Hermosillo y Ernesto Ruffo dirigieron una carta de tres cuartillas a los diputados de los congresos locales del país llamándolos a no aprobar la reforma política del Distrito Federal, ya que, sostienen, la ciudad de México tendrá una autonomía inédita, pues el gobierno federal mantendrá la responsabilidad del financiamiento a la educación y a los servicios de salud, lo que resulta inequitativo, porque ningún otro estado recibe un trato similar.

En su misiva alegan, por ejemplo, que el resto de las entidades destinan hasta 62 por ciento de sus ingresos a la educación, y esta capital no destinará nada.

Citan también que al Distrito Federal se le aprobó un Fondo de Capitalidad que implica mayor presupuesto por ser la capital del país, y también tiene acceso al Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social, que administra la Federación.

Subrayan que una de las razones de mayor peso en el cabildeo de esa reforma fue el aumento de los ingresos de la entidad: El Distrito Federal sería responsable de determinar su techo de endeudamiento y recibiría, por ley, un fondo de capitalidad sin necesidad de negociarlo en el Congreso, y recibirá recursos adicionales de la Federación, como ejemplo de ello, 31 mil millones de pesos para financiar la educación básica.

Martínez, Hermosillo y Ruffo aseveran que la reforma que se ha enviado a las legislaturas de los estados significa un perjuicio a los ya limitados ingresos de nuestras entidades, debido a que con esta reforma sólo la ciudad de México gana económicamente en detrimento del resto de los estados.

Al respecto, la dirigencia del PRD-DF rechazó la postura de los panistas, y en voz de su líder, Raúl Flores, consideró que esa misiva tiene un sesgo xenofóbico (sic) que trata de crear desánimo entre los habitantes de esta capital.

Dijo que la carta contiene falsedades, pues no sólo se llevará recursos, sino que aporta 17 por ciento de los ingresos totales del país y da atención social y educativa, así como diversos servicios a mucha gente que viene de otras entidades, parte de lo cual se financia con recursos propios.