El grupo parlamentario del PAN en el Senado apremió al gobierno federal a poner en marcha las medidas de seguridad necesarias para proteger a turistas y alpinistas en el parque Iztaccíhuatl-Popocatépetl, donde los asaltos violentos se han incrementado en los últimos meses de manera alarmante.

A nombre de su bancada, Silvia Garza Galván dijo que son 39 mil 820 hectáreas las que por la belleza y altura de los volcanes reciben turismo de aventura que deja una importante derrama económica en la región mexiquense, misma que se ve amenazada por el embate del crimen.

Asaltos a alpinistas a 4 mil 100 metros de altura han motivado protestas, que obligaron a la Comisión Estatal de Seguridad Ciudadana del estado de México a crear el primer agrupamiento de seguridad de alta montaña.

Si bien es cierto que con la creación de dicho agrupamiento se tuvo un gran avance, los asaltos no han disminuido y apenas el pasado noviembre se presentó un robo a seis personas, detalló.

Lamentó que en los últimos años haya disminuido el turismo en el parque y que aun a una altura de más de 4 mil 700 metros, se estén comentiendo asaltos.

Recordó que en julio de este año un grupo de montañistas de Puebla fue despojado de sus pertenencias, incluido su equipo para escalar, y en los últimos meses ocurrieron varios robos en la zona de San Rafael, lugar por el que suben los alpinistas que se dirigen a la cabeza de la mujer dormida, así como en otras rutas de mayor grado de dificultad.

Garza Galván insistió en que es necesario proteger el parque y ello requiere que el gobierno federal implemente acciones contra la delincuencia organizada.

Los montañistas tienen claro que la actividad que realizan es de alto riesgo y están dispuestos a aceptar la posibilidad de que ocurra un accidente al escalar, pero lo inaceptable es la inseguridad, dijo.