En el balompié mexicano se ha perdido el respeto y la admiración por los grandes jugadores, lo cual ha repercutido directamente en la calidad de las nuevas generaciones de futbolistas nacionales, consideró Omar Mendiburu, ex goleador de Cruz Azul en la década de los 70.

Explicó que actualmente los jóvenes no aprovechan los conocimientos de sus compañeros más experimentados para adquirir ciertas habilidades que los podrían hacer destacar, lo cual ha provocado que los clubes de la Liga Mx muestren más interés por contratar a elementos extranjeros que mexicanos.

Ahora un chavo de 17 años que fue campeón del mundo llega a un equipo y no le hace caso a nadie, piensa que es el mejor jugador del planeta, y esa falta de madurez ha ocasionado que muchísimos talentos de categorías menores se pierdan y no lleguen a tener una carrera importante en primera división, dijo en entrevista con La Jornada.

El también ex integrante de equipos como Tigres, Puebla y Tampico Madero añadió que los clubes tienen que seguir encaminando al futbolista para lograr su máximo desarrollo, pero los jugadores deben ser humildes y aprender de sus compañeros en beneficio propio. No pueden conformarse con cumplir un solo objetivo, hay que seguir adelante para llegar más lejos.

Recordó que en sus tiempos de jugador los juveniles aprendían más de los veteranos que de los mismos entrenadores.

“Me tocó la época de los 70, tenía de compañeros en Cruz Azul a Miguel Marín, Miguel Ángel Cornero, Alberto Quintano, Javier Kalimán Guzmán y, Héctor Pulido, entre otros.

Toda esa pléyade de extraordinarios futbolistas fueron los que me enseñaron más que el técnico, pues la convivencia era diaria y los chavos teníamos que obedecer a los mayores. Creo que eso se ha perdido un poco en la actualidad, señaló.

El ex delantero, quien fue bicampeón con Cruz Azul bajo la dirección técnica de Ignacio Trelles en las temporadas 78-79 y 79-80, también mencionó que otro factor que ha influido en el rendimiento de los jugadores mexicanos es la gran cantidad de dinero que reciben.

No quiero decir que no se lo merezcan; al contrario, si ellos producen tantas ganancias tienen derecho a recibir una buena parte de éstas, pero también deben ser capaces de saber que tienen una responsabilidad: entender que también hay que darle al futbol, no sólo exigirle. Si estuvieran conscientes de eso podrían generarse cosas positivas, expresó.

Finalmente, el ex atacante confió en que la próxima temporada el equipo cementero pueda salir de la mala racha que enfrenta.

Cruz Azul es una institución triunfadora, le ha faltado la cereza del pastel, que es el campeonato de liga, pero no pasa nada, son los vaivenes de la vida, hay que reponerse de este momento negativo. Seguramente no tardará mucho tiempo en levantar otra vez el trofeo de campeón; esperemos que sea en el próximo torneo, indicó.