Con un llamado a mantenerse en alerta máxima, maestros disidentes se preparan para hacer de 2016 el año de la resistencia contra la reforma educativa y por la defensa de la enseñanza pública. Dirigentes magisteriales aseguraron que en los próximos meses enfrentarán retos que los llevarán a una acción más decidida.

Los acuerdos de su asamblea nacional representativa incluyen la organización de una nueva jornada de brigadeo nacional, la consulta a los profesores de base para impulsar un paro magisterial indefinido –de aplicarse el despido de maestros por la evaluación del desempeño– y la realización del primer Encuentro Nacional de Diálogo para el inicio de una verdadera transformación educativa.

Agregaron que el 7 de enero, cuando cerca de 1.2 millones de maestros y trabajadores de la educación regresen a las aulas tras concluir las vacaciones, se impulsarán acciones para buscar la organización y participación de docentes en todos los estados.

Vamos a enfrentar con todo esta reforma que no es educativa, afirmó Pedro Hernández, integrante de la dirección política de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), quien destacó que 2016 será un año de lucha. Vendrá la segunda etapa de la evaluación del desempeño y el anuncio de un nuevo modelo educativo.

Explicó en entrevista que el magisterio disidente también impulsará la construcción del diálogo con todos los sectores sociales para construir un proyecto educativo realmente incluyente, en el que se escuchen todas las voces, incluidas aquellas que no están de acuerdo con los planteamientos de la CNTE.

Para ello, indicó, buscamos que académicos e investigadores se sumen, pero también aquellos que tengan propuestas. Este año, dijo, queremos abordar los cuestionamientos de fondo de la reforma educativa.

Hernández, profesor con más de 25 años de servicio docente, agregó que no somos los únicos que hemos insistido en que la reforma, tal y como está planteada, no sirve. Hay evidencias de que es un fracaso no sólo en su búsqueda de legitimidad, sino que en los hechos no se ha reflejado en una mejora de lo que ocurre en las aulas.

En la ruta de acción aprobada para 2016 se prevé para la próxima semana una reunión de su comisión nacional de educación y de la dirigencia magisterial con intelectuales y especialistas para impulsar el primer encuentro nacional de diálogo, que podría realizarse el 23 de enero.

El 8 de enero se planea un encuentro con representantes magisteriales de todo el país para presentar el balance nacional de la resistencia contra la evaluación del desempeño y la aprobación de la jornada de lucha 2016, en la que no se descarta mantener el boicot a la prueba estandarizada.

Dirigentes magisteriales del estado de México, Distrito Federal y Guerrero informaron que también se acordó citar a la comisión nacional de asuntos jurídicos y derechos humanos de la CNTE el próximo 9 de enero, para concluir la elaboración de su ruta jurídica con la exigencia ante el gobierno federal de alcanzar la libertad de los presos políticos, el respaldo legal a los trabajadores de la educación que no se presentaron a la evaluación del desempeño y la denuncia en el ámbito internacional por violación a los derechos laborales.

El magisterio disidente acordó en su asamblea representativa sumarse a las acciones de protesta de los trabajadores de la salud, en particular de las enfermeras, previstas para el 6 de enero y asistir a la asamblea popular que se realizará el próximo sábado en la normal Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero.