Por primera vez, hoy, el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) sesionará con ministros que no fueron designados en 1995 y, un día después, serán recibidos en sesión solemne dos nuevos integrantes, Norma Lucía Piña Hernández y Javier Laynez Potisek.

El martes se llevará a cabo la sesión solemne en la que Piña Hernández y Laynez Potisek serán investidos formalmente como ministros del máximo tribunal, recibirán su toga y credenciales que los acreditan como tales; además se oficializará que Piña se integrará a la primera sala y Laynez a la segunda.

Aun cuando la Constitución señala que los ministros del máximo tribunal deberán ser preferentemente de carrera judicial, la mayoría del pleno no cuenta con carrera judicial (seis de 11), entre los que destacan, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Eduardo Medina Mora y Javier Laynez Potisek, además de Fernando Franco González Salas, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea y José Ramón Cossío.

En tanto, los ministros con carrera judicial son: Luis María Aguilar Morales, Margarita Luna Ramos, Jorge Pardo Rebolledo, Alberto Gelacio Pérez Dayán y Piña Hernández.

Esta nueva integración resolverá en el primer semestre, entre otros asuntos, la constitucionalidad de los códigos civiles de los estados en los que se señala que un matrimonio sólo puede ser entre un hombre y una mujer. Si bien la primera sala ha determinado la inconstitucionalidad de diversos códigos civiles por considerar que son no equitativos al no permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, las decisiones han sido adoptadas en juicios de amparo.

Por otra parte, los ministros resolverán la controversia constitucional que interpuso la Cámara de Diputados en contra del Reglamento de Juegos y Sorteos, promulgado por el presidente Enrique Peña Nieto, en la que cuestionan la facultad de la Dirección General de Juegos y Sorteos para autorizar, controlar, vigilar, tramitar y resolver los procedimientos administrativos y sancionatorios que deriven de juegos con apuestas y sorteos, así como expedición y modificación de permisos de juegos y apuestas.

Igualmente resolverán la acción de inconstitucionalidad que interpuso la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal en contra del artículo 323 septimus del Código Civil para el Distrito Federal, en la que se demanda la inconstitucionalidad del llamado síndrome ­parental.