El presidente Enrique Peña Nieto eligió Twitter, su medio preferido, para lanzar la primicia de la recaptura del capo del cártel del Pacífico, Joaquín El Chapo Guzmán. Esto fue a las 10.19 de la mañana. A partir de ese momento, su tuit, el que dice Misión cumplida, fue replicado mil 300 veces cada minuto hasta llegar en 20 minutos, a 25 mil repeticiones en esta red social.

Quince minutos después del estallido de esta bomba informativa, la etiqueta #Chapo, el llamado hashtag, alcanzó el primer lugar del trending topic (tt), o tema dominante, en los sitios mexicanos, según el sitio Trendinalia México, que se dedica a estas mediciones y monitoreos. La tendencia se mantuvo en el sitio número uno el resto del día. Poco tiempo después, contagiadas las redes sociales de Estados Unidos, América Latina y España, esta misma etiqueta se convirtió en tt mundial durante algunas horas.

Las reacciones de los usuarios a la noticia fueron diversas. Lo que dominó fue el humor, a través de los memes o caricaturas, y el escepticismo. A diferencia del fenómeno que se produjo cuando fue capturado por segunda vez (22 de febrero de 2014, tras 13 de prófugo) en esta ocasión las dudas y recelos no giraron en torno a la certeza de su identidad, sino al hecho mismo de que de verdad hubiera huido, como sostiene la versión oficial, a través de un túnel cavado en el penal de máxima seguridad del Altiplano, y la coyuntura de su nueva detención, esta vez en Los Mochis, en su natal Sinaloa, en el contexto de pésimas noticias para la economía mexicana, que merman la credibilidad de la administración.

Se debatió duro y tupido sobre si Guzmán debe ser entregado a la justicia estadunidense para que no vuelva a huir.

Por supuesto, también el gabinete presidencial y los correligionarios del PRI de Peña Nieto eligieron el Twitter para patentar, desde sus redes sociales, posiciones de felicitación y elogio a su jefe.

Rosental Alves, director del Centro Knight de Periodismo de la Universidad de Texas, que se especializa en las vanguardias tecnológicas en los medios de comunicación, advirtió en su cuenta que en pleno frenesí informativo con la noticia, los portales de los periódicos de México estaban muy lentos por el tráfico de la nota de El Chapo. “Deberían tornar sus homes (sitios) más livianos por un rato”, aconsejó el periodista brasileño.

Pero no sólo fue el gobierno mexicano quien convirtió a Twitter en su trampolín para divulgar la noticia y sus posiciones. La DEA, desde su cuenta, expresó su beneplácito por la detención del narcotraficante, a las 11:13 horas.