El presidente Enrique Peña Nieto condecoró al rey de Arabia Saudita, Salman bin Abdulaziz Al Saud, con la Orden del Águila Azteca –máximo galardón que el gobierno de México otorga a extranjeros– durante la gira que realiza por países árabes. En reciprocidad, el anfitrión entregó al mandatario mexicano la Medalla del Rey Abdulaziz.

El intercambio de condecoraciones se realizó el domingo por la noche en Riad, la capital saudita, después de una ronda de conversaciones entre los dos jefes de Estado en el Palacio Al-Yamamah, informó la agencia oficial saudita Spa.

La Orden del Águila Azteca se entrega para reconocer a extranjeros que han prestado servicios prominentes a la nación mexicana o a la humanidad y, en casos excepcionales, para corresponder por cortesía a las distinciones de que sean objeto funcionarios mexicanos. Durante su mandato, Peña Nieto ha entregado esta distinción a la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff; al rey de España, Felipe VI, y al ex presidente de Uruguay José Mujica.

En el centro del escándalo mundial

Apenas el día 2 de este mes, el monarca saudita estuvo en el centro del escándalo mundial después de ejecutar a cuatro opositores acusados de terrorismo: el líder religioso chiíta Nimr Baqr al-Nimr, quien encabezó las manifestaciones opositoras en 2011 durante la primavera árabe, y tres estudiantes universitarios que también participaron en esas movilizaciones. Los disidentes fueron decapitados y sus cuerpos crucificados. Las órdenes de ejecución fueron emitidas el septiembre de 2015 por el sistema judicial saudí (que no se basa en los principios del derecho, sino en el Corán), y ratificadas después por el rey Salman bin Abdulaziz Al Saud.

Además, este fin de semana el régimen del monarca ejecutó a 43 terroristas acusados de haber perpetrado ataques contra instalaciones gubernamentales en 2003. Presuntamente estas personas formaban parte de la organización Al-Qaeda.

Las ejecuciones fueron realizadas en 12 ciudades. Algunos de los delitos imputados a las 47 víctimas de la pena de muerte fue haber adoptado la ideología radical takfiri (o radicalismo sunita), por unirse a organizaciones terroristas o participar en complots criminales.

La entrega de reconocimientos entre el monarca árabe y el mandatario mexicano se realizó la noche del domingo en la ciudad de Riad, la capital saudita. En esa sesión ambos abordaron las relaciones bilaterales y temas de la cooperación entre ambas naciones y de la situación mundial, agregó el despacho oficial saudí. Durante la visita de Estado de Peña Nieto se firmaron 11 acuerdos entre los dos gobiernos.

En tanto, ayer, en Abu Dhabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos, el titular del Ejecutivo aseveró que México asume su responsabilidad global frente a los efectos climáticos del futuro. Peña Nieto participó en la Semana de la Sustentabilidad 2016, realizada en esta ciudad.

Aunque es poco probable un eventual agotamiento de los combustibles fósiles –mencionó–, la amenaza del calentamiento global obliga al mundo a una transición hacia energías más limpias y renovables.

Ante el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, refirió que de acuerdo con datos de la Agencia Internacional de Energía, para 2030 se duplicarán las necesidades energéticas, y para 2050, una población mundial de cerca de 9 mil 700 millones de habitantes requerirá tres veces más energía.

Dijo que a tres años de su administración y gracias a la reforma energética, se ha logrado una reducción de 48 por ciento en el uso de combustóleo en la generación de energía. Además, han disminuido las tarifas eléctricas para hogares, comercios e industria; y la transición hacia energías más limpias, como el gas natural, nos ha permitido disminuir en 45 por ciento nuestras emisiones de CO2, relacionados con el uso de combustóleo. Apuntó que la meta para 2024 es que el país utilice 35 por ciento de energías limpias, y que para 2050 sea 50 por ciento, en la actualidad es de 21 por ciento.