Cultura
Ver día anteriorViernes 12 de febrero de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
La oferta teatral

La obra Oír aullar una vez a los lobos comenzará funciones en el foro Un Teatro

La intimidad de una pareja sirve para preguntar, ¿dónde nos hemos quedado?

Trata sobre la búsqueda de la esencialidad, porque estamos acostumbrados a vivir con máscaras para funcionar socialmente, con la pareja y la familia, explica el dramaturgo José Alberto Gallardo

Foto
Jessica Sandoval y Francisco Rubio en una escena del montaje, inspirado en un libro de Peter Handke, que narra cómo nos movemos por una serie de estrategias que al final nos alejan de nosotros mismos y acabamos desconociéndonos, dice Gallardo a La JornadaFoto cortesía de la producción
 
Periódico La Jornada
Viernes 12 de febrero de 2016, p. 5

En la obra Oír aullar una vez a los lobos, que comenzará temporada el sábado 13 en el foro Un Teatro, el dramaturgo José Alberto Gallardo (DF, 1977) aborda la identidad, los papeles sociales y los estereotipos en la sociedad moderna.

Inspirada en La mujer zurda, del escritor austriaco Peter Handke, la puesta en escena presenta a Estefan, funcionario del arte y la cultura, quien en una reunión con sus pares de alto nivel decide denunciar la corrupción del sistema del que forma parte.

Su pareja, Marianne –reconocida artista escénica–, por su parte, está a punto de sumergirse en una obra en la que verá comprometida su propia identidad.

Gallardo, quien también dirige el montaje, explica que la historia, además de generar imágenes atractivas, adentra al espectador en la intimidad de la pareja de una forma muy particular, que vale la pena ver. La obra nos invita a preguntarnos, ¿dónde estamos o dónde nos hemos quedado?

Con las actuaciones de Jessica Sandoval y Francisco Rubio, Oír aullar una vez a los lobos nos muestra la máscara social que llevan las personas, sin reparar en aquello que las hace únicas y valiosas.

Extrañamientos y dudas

En el montaje de Gallardo asistimos a la cotidianidad de una pareja, a sutiles extrañamientos y dudas, empujados por la imperiosa necesidad de Estefan por hacerse de un rostro y de Marianne por encontrar su forma más cruda y pura.

La obra trata sobre la búsqueda de nuestra esencialidad. Los dos personajes, cada uno por su lado, intentan desenmascararse porque estamos acostumbrados a vivir con un enorme vestuario y una serie de máscaras para poder funcionar socialmente, con la pareja, incluso en la familia, explica el dramaturgo a La Jornada.

A decir del director, vivimos en una sociedad que nos impone estereotipos, pero llega un punto en la vida que nos obliga a tirar todas esas máscaras para buscarse uno mismo y verse en su forma más esencial y salir de la obscenidad en la que se estaba viviendo, esta forma de vivir fuera de escena.

Gallardo se inspiró en el libro La mujer zurda, de Peter Handke, porque el personaje femenino, que en el montaje se llama igual, decidió dejar a su pareja para rencontrarse consigo misma. Es muy inquietante en la novela de Handke que en apariencia no hay motivos para que la protagonista abandone a Estefan y, de pronto, toda la sociedad se siente inquieta porque ella ha decidido dejarlo, aunque en realidad está buscándose a sí misma; esto fue lo que llamó mi atención.

En la propuesta escénica, Gallardo indaga en el personaje masculino, algo que no sucede en el texto de Handke, donde su participación es más breve y sobre él se ignoran muchas cosas.

“En nuestra obra –explica el dramaturgo– tomo como pretexto que la mujer decide abandonar a su pareja y esta situación no ocurre en Alemania como en la novela de Handke, sino aquí en la Ciudad de México, en una época contemporánea. Él es un alto funcionario cultural y ella es una artista y a partir de ciertos sucesos que les ocurren, se dan cuenta de que se han ido revistiendo de una simulación hasta que ya no es posible relacionarse por lo que necesitan desenmascararse y finalmente se separan”.

El montaje, que se estrenó en octubre de 2015, tiene como tema de fondo el ambiente del arte y de las instituciones culturales.

Al respecto, Gallardo señala: “Pareciera que la mejor forma de transitar por estos mundos es justamente fingiendo o haciendo esto que llamamos política y donde lo que queda muy de lado es nuestra parte más esencial y lo más humano.

En la vida nos movemos por una serie de estrategias que al final nos alejan tanto de nosotros mismos que acabamos desconociéndonos, agrega.

Jessica Sandoval y Francisco Rubio participan en Oír aullar una vez a los lobos, que se escenificará del 13 de febrero al 6 de marzo: sábados a las 19 horas y domingos a las 18 horas en el foro Un Teatro (avenida Nuevo León 46, colonia Hipódromo Condesa).