Utilizan la técnica de biorremediación de suelos, desarrollada por Refugio Rodríguez
La tecnología permitirá liberar las tierras de plaguicidas organoclorados para el cultivo
En pruebas de laboratorio se combinaron residuos de naranja con nitrógeno, fósforo y agua, lo cual tuvo resultados exitosos, explica la investigadora del Instituto Politécnico Nacional
Jueves 25 de febrero de 2016, p. 2
Con biotecnología elaborada a partir de desechos orgánicos, la científica del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN), Refugio Rodríguez Vázquez, rehabilita chinampas del canal de Cuemanco contaminadas con plaguicidas organoclorados. Su objetivo es convertirlas en suelos aptos para cultivos orgánicos.
La especialista del Departamento de Biotecnología realiza el proyecto enfocado a promover la agricultura sustentable con el apoyo de la organización no gubernamental Yolcan.
Rodríguez Vázquez cuenta con la única patente mexicana para biorremediación de suelos, la cual emplea granos verdes de café y café gastado para la restauración. Con la finalidad de ensayar en el laboratorio la eliminación de los plaguicidas, su equipo adaptó dicha tecnología en sustrato sólido y sustituyó la materia orgánica original con cáscaras de naranja. Los resultados fueron positivos.
Para las pruebas de laboratorio combinamos los residuos del fruto con pequeñas cantidades de nitrógeno, fósforo y agua, a los ocho días comenzamos a apreciar la degradación, después de 16 días la remoción fue total
, explicó la investigadora.
La aplicación de la técnica de remediación biológica recién comenzó en una de las chinampas; se llevará a cabo en otras 10, y existe la posibilidad de extenderla a más áreas de cultivo.
También se capacitará a los agricultores del lugar. El equipo de investigadores lleva un seguimiento quincenal para evaluar la proceso. Dependiendo de los resultados, determina los ajustes y, de requerirse, programa una segunda aplicación para remover la totalidad de contaminantes, con el propósito de tener espacios aptos para cultivos.
La investigadora del Cinvestav-IPN señaló que las chinampas podrían estar contaminadas los primeros 50 centímetros de profundidad, distancia a la que generalmente impactan los agroquímicos. Hicimos muestreos a 30 centímetros de profundidad y encontramos la presencia de varios plaguicidas organoclorados
, afirmó.
La biotecnología que usan para rehabilitar las chinampas ya la han empleado con éxito para remover plaguicidas e hidrocarburos de suelos en Tepeaca, Puebla; por ello, se tienen expectativas de que se obtendrán resultados positivos en un periodo de tres a seis meses en Xochimilco, según sea el grado de contaminación.
Para completar la recuperación, Rodríguez Vázquez informó que tratarán el agua usada para el riego de cultivos porque, según los análisis realizados, está contaminada con organismos patógenos, como Escherichia coli, Salmonella y coliformes fecales.
Aplicarán un sistema de biofiltros (prototipo validado por la Comisión Nacional del Agua en Pajacuarán, Michoacán), que trata 20 litros por segundo del agua municipal; también se adaptará un reactor que opera mediante nano-cristales de dióxido de titanio, con el cual han purificado aguas municipales pretratadas en un programa piloto.
Estimó que la remoción de plaguicidas de las 10 chinampas en las que se trabaja podría durar un año, aunque el tratamiento del agua para riego tardará un poco más. El reto es que en tres años estén completamente rehabilitadas y aptas para la producción de orgánicos de calidad.