París. La compañía francesa Pixium Vision, que desarrolla sistemas para recuperar la vista, anunció el miércoles que realizó con éxito un primer implante de su retina artificial, denominado Iris II, que aspira a comercializar en Europa a partir de mediados de 2016. Ofrece esperanza a los pacientes que perdieron la vista a causa de la retinitis pigmentaria, patología de la retina hereditaria y degenerativa. Con 150 electrodos, tres veces más que su prototipo, Iris I, estimula artificialmente la retina defectuosa y restaura parcialmente la visión para captar formas y movimientos. Esta primicia mundial, practicada a un paciente de 58 años, se desarrolló con éxito, declaró en un comunicado el profesor Michel Weber, jefe del servicio de oftalmología del CHU de Nantes (Francia) donde se realizó el implante el pasado enero. Además de los implantes, la investigación médica explora también pistas en torno a la terapia genética y celular para restaurar la vista.