Obstaculizan derecho a la libertad sindical, acusan abogados
Viernes 26 de febrero de 2016, p. 14
Se debe acabar con la manipulación de los recuentos por la titularidad de contratos colectivos de trabajo en México, y limitar la participación de las empresas en estos conflictos, ya que éstas tienen el carácter de terceros interesados y ésto les da la facultad de ser parte en los juicios, con lo que se impide el derecho de libertad sindical; además de que propicia entre los trabajadores la discriminación por motivos gremiales.
Nahir Velasco, secretario del Trabajo de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos (ANAD), planteó lo anterior al participar en el foro que llevó a cabo la Universidad Obrera sobre la reforma al sistema de justicia laboral.
Explicó que en la práctica cotidiana, las empresas, cuando hay procesos de titularidad, de manera inconstitucional pueden incidir en los recuentos, ya que determinan dónde se llevarán a cabo éstos y cuándo, plantean incidentes y se entrometen en las decisiones de los trabajadores. Además de que los votos de los empleados en los recuentos sólo expresan su miedo a las amenazas de despido que les hacen sus patrones.
El abogado indicó que es fundamental plantear cambios legales para garantizar que se pueda ejercer este derecho y sostuvo que en realidad, en la Ley Federal del Trabajo no existe un concepto definido y preciso de libertad sindical, lo que da margen a que este sea tergiversado a conveniencia de las partes.
En su exposición, se refirió además a la multiplicación de los contratos colectivos de protección patronal, lo cual está rompiendo la base del derecho colectivo, el equilibrio entre los factores y ha llevado a la representación sindical al ancho campo de la simulación
. Por lo que se debe hacer cambios fundamentales en materia laboral para acabar con esta epidemia de los sindicatos blancos.
En este sentido agregó que de los contratos de protección, además de que se firman a espaldas de los trabajadores, anulan el acuerdo bilateral entre las partes, abaratan el costo de la mano de obra, aumentan la explotación del trabajo sin freno ni vigilancia y “sobregiran las ganancias patronales.
Asimismo son fuente de corrupción sindical patronal y de las autoridades laborales. Incluso repercuten en la injusticia social, degradan el estado de derecho.