Antes de que concluya el actual periodo legislativo se tendrán que aprobar las iniciativas de ley para prevenir y sancionar la desaparición de personas y para prevenir, investigar y sancionar la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, aseveró Santiago Corcuera Cabezut, del Comité Contra la Desaparición Forzada de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

Ambas leyes tienen que aprobarse en este periodo, porque sería inconcebible e irresponsable por parte del Poder Legislativo no sacar una muy buena ley.

Entrevistado luego de participar en el foro Desaparición forzada, una realidad vigente, Corcuera Cabezut señaló que si bien las iniciativas presentadas por el presidente Enrique Peña Nieto son buenas, hay que realizar varios ajustes.

Consideró que se debe seguir presionando al Estado mexicano, desde las instancias internacionales, para que termine la impunidad casi absoluta que prevalece en el caso de la tortura y las desapariciones, principalmente las forzadas.

Las organizaciones y los familiares de desaparecidos, agregó, insisten en que el Senado pretende elaborar un dictamen de la ley de desaparición forzada que no recoge las propuestas de la sociedad civil y está lejos de los estándares internacionales.

Entre ellas, que el gobierno federal tipifique la desaparición forzada a escala nacional como delito y normar conducta de desaparición cometida por particulares, con una condena menor respecto de la que sea cometida por el Estado.

El gobierno federal debe atender los llamados que hacen las convenciones internacionales para que cuando una persona que cometió la desaparición brinde información que conduzca al esclarecimiento del caso, más allá de toda verdad histórica.

Por otra parte, dijo que en México hacen falta especialistas que brinden apoyo sicosocial a los activistas y familiares de personas desaparecidas para que continúen en la lucha y búsqueda de sus parientes, porque sufren un daño directo en sus emociones y en su equilibrio sicológico por el golpe permanente que implica esta asquerosa práctica.

Durante el coloquio, Rosario Cabañas, hermana del guerrillero guerrerense Lucio Cabañas, señaló que la desaparición forzada es un crimen de Estado que está vigente. Desafortunadamente en todos los estados se comete este delito porque es como una antropología social de todos los luchadores sociales, activistas, periodistas y de todas las familias.

Lamentó que en la actualidad quienes defiende sus derechos, el Estado los considera guerrilleros. En la actualidad es un delito ser joven, estudiante, mujer. Los feminicidios no tiene límite para este crimen que estamos viviendo en el país.