La incursión de árbitras en los partidos de la Liga Mx sucederá muy pronto. Sólo es cuestión de capacidad, no tiene nada que ver con el género, aseguró Quetzalli Alvarado, la silbante mexicana más experimentada en la actualidad.

El mayor impedimento para que ella pueda arbitrar en la máxima categoría del balompié nacional es que aún no cumple con los parámetros físicos que exige la Federación Internacional de Futbol Asociado (FIFA) a todos los jueces, sean hombres o mujeres, pues solicita que recorran 40 metros en 5.8 segundos. Alvarado lo hace en 6.4 segundos.

No obstante, es optimista y confía que próximamente, tanto ella como las demás silbantes podrán superar el requisito y aparecer en primera división.

¡Claro que estaremos ahí!, es otra época, la gente tiene otra visión y los jugadores cada vez están más acostumbrados a vernos en la cancha, declaró Alvarado, quien desde hace cinco años dirige encuentros de la liga de ascenso.

Este martes se celebra el Día Internacional de la Mujer y consideró que aún hay machismo en el futbol local, pero creo que la sociedad ya está un poco más preparada para vernos dirigir un partido entre hombres.

Relató que quienes son más machistas son los aficionados, y de ellos, las propias mujeres, pues no les gusta vernos en la cancha y empiezan a gritarnos cualquier cosa, que nos vayamos a casa, que nos pongamos a lavar los trastes, pero ya estamos acostumbradas, sólo los ignoramos.

Estamos en otro siglo, la mentalidad de los mexicanos ha cambiado y las mujeres deben hacer su parte para erradicar el machismo de las canchas, pidió la silbante Quetzalli AlvaradoFoto Jam Media

La silbante internacional de 40 años de edad confesó que antes sí se enojaba por los insultos que recibía desde la tribuna; sin embargo, indicó que con el tiempo aprendió a sobrellevarlos.

“Al principio me molestaban, decía: ‘¿cómo es posible que una mujer insulte a otra?’, pero es parte de la cultura. Aunque no lo justifico, no es que esté bien que nos recuerden a nuestra madre, pero ya estamos habituadas, ya no les ponemos atención. Son los típicos frustrados que van a descargar su furia al estadio”, sostuvo.

Aseveró que contra lo que se piensa, las féminas no tenemos ninguna desventaja en este oficio supuestamente varonil, pues como mujeres tenemos algunas armas y encantos, entonces hay que explorarlos en nuestro favor.

La árbitra, quien posee gafete FIFA desde 2004, añadió que increíblemente los jugadores no son groseros con nosotras. Como esto es algo profesional saben comportarse; si les sabes hablar bien los desarmas facilito, ellos no son el problema, los irrespetuosos son los aficionados.

Finalmente, la también médico veterinario zootecnista afirmó que entre más tolerancia exista del público, será más fácil hacer nuestro trabajo. Estamos en otro siglo, la mentalidad de los mexicanos ha cambiado y las mujeres deben hacer su parte para erradicar el machismo de las canchas.