El presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth, aseguró que no hay ninguna negociación entre PRI y PAN para llevar a cabo una contrarreforma electoral, a fin de regresar al esquema de 2006 y permitir que candidatos, partidos y particulares compren tiempo en radio y televisión.

Calificó de leyenda urbana la versión de que junto con el presidente del PRI, Manlio Fabio Beltrones, prepara esa modificación legal que las televisoras exigen, dado los recursos millonarios que representan.

En entrevista, insistió en que no hay ninguna negociación, pero su postura pública es por revisar y ajustar ese modelo que estatizó el mercado de la comunicación política, asfixió las libertades y hoy se utiliza para perseguir a comunicadores.

Recalcó que AN se equivocó al aprobar esa reforma electoral en 2007, ya que se canceló el debate y ha permitido que el dirigente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, lleve más de un millón de promocionales en radio y televisisión, para promover su imagen a dos años y medio de la elección presidencial de 2018.

Se le recuerda que también el presidente del PAN, Ricardo Anaya, utiliza espots. La diferencia es que Anaya no está en campaña para 2018; el panista no ha hecho pública su intención de contener; el dirigente de Morena, sí.

Este modelo de comunicación, advierte, requiere flexibilización y reducir los controles políticos. Nadie está proponiendo, por lo menos no he escuchado a nadie, que volvamos al esquema de 2006, de la compra indiscriminada.

Sobre la sugerencia de Beltrones de permitir que parte de los anuncios en medios electrónicos sean comercializados, sostuvo que no la conoce e insistió en que está en favor del modelo propuesto por Alonso Lujambio, para que los partidos y cualquier persona que quiera interactuar en política acceda a radio y televisión.

–¿Ello no implica regresar a las guerras sucias, a las campañas de odio orquestadas por los grupos de poder contra algún candidato?

–Esta idea de que los ciudadanos somos menores de edad y no podemos escuchar cosas feas en el debate público, lo que está provocando es la asfixia del sistema democrático.

A su juicio, el debate político en algunas ocasiones debe ser rudo y no poner cortapisas o bozales a la libertad de expresión.

Mientras, el secretario general del PAN, Damián Zepeda, consideró que regresar al anterior modelo de comunicación tal como estaba, no es prudente.

Sin embargo, como en todos los casos, el partido está abierto a valorar cosas específicas.

Los señalamientos del panista se producen luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación exoneró de sanciones a locutores de televisión, que criticaron la legislación electoral y los espots de los partidos durante las transmisiones de la visita del Papa a México.

Ello como parte de las presiones de las televisoras para volver al anterior modelo de comunicación, que les permitía vender tiempo a los partidos, señalan especialistas.

Zepeda destacó que la reforma política tuvo avances, pero como en todos los casos, son perfectibles. Añadió que su partido está dispuesto a debatir cambios, pero hay que hacerlo con una visión amplia e integral.

En comunicación seguramente hay espacios de mejora que permitan mayor libertad y debate de ideas, subrayó vía telefónica.

Recordó que una propuesta del PAN para una eventual reforma es incluir la segunda vuelta electoral, a fin de generar gobiernos con mayor apoyo ciudadano.