La exclusión de algunas corrientes políticas o la división en algunas de ellas impidió que hasta el cierre de esta edición el Consejo Estatal del PRD pudiera aprobar la lista de sus 60 candidatos a integrar la Asamblea Constituyente.

La relación de nombres que se dio a conocer cerca de las nueve de la noche la encabezaban 11 propuestas externas, que a decir del líder de Izquierda Democrática Nacional (IDN), René Bejarano, fueron impuestos sólo por los dirigentes de Nueva Izquierda (NI), Jesús Ortega, y de Vanguardia Progresista, Héctor Serrano, quienes también pusieron a los que ocupaban los siguientes 10 espacios.

La lista está integrada por la columnista Katia D’Artigues; Enrique Provencio, ex procurador ambiental; la feminista Marcela Lagarde; el periodista Miguel Ángel Velázquez; la bloguera Yeltsin Mendoza; Humberto Lozano, anterior dirigente de la Cámara de Comercio de esta ciudad, e Ifigenia Martínez, como externa.

En la octava posición se colocó a Jesús Ortega, después Regina Yáñez, líder de la organización GIRE; la activista Lol Kin Castañeda, seguida de Julio César Moreno, Diana Arellano, Fernando Cuéllar, dirigente del Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal, Juan Ayala y Armando Contreras.

Exclusiones

A las 23 horas, algunos perredistas informaron que al interior de NI había división porque se excluyó de esa lista a gente del delegado en Gustavo A. Madero, Víctor Hugo Lobo, y eso impedía sacar un acuerdo.

Asimismo, Alejandro Sánchez, de IDN, reclamó que les permitieron designar a un joven en el lugar 15, lo que rechazaron y exigieron un lugar para René Bejarano entre los primeros 10 candidatos.

Esa postura no era aceptada por los líderes de las corrientes NI, Vanguardia Progresista, Foro Nuevo Sol (que propuso a Lol Kin) y por Alternativa Democrática Nacional, quienes dijeron que aprobaría la lista sin la participación de Izquierda Democrática Nacional.

Los trabajos del Consejo Estatal perredista estaban convocados para reiniciar a las 17 horas, aunque seis horas después continuaban las negociaciones, pero sin acuerdos entre los líderes de IDN, NI, Foro Nuevo Sol y ADN, mientras los perredistas con derecho a voto esperaban en las escalinatas o en pasillos del hotel María Isabel Sheraton para ser convocados.

Raúl Flores, presidente del Partido de la Revolución Democrática en la Ciudad de México, adelantó que en esa lista habría muchas sorpresas, mientras que los líderes de distintos grupos consideraban que las negociaciones estaban tan atoradas que este asunto se resolvería hasta la madrugada.

Algunas voces del sol azteca pedían que se declarara de nueva cuenta un receso, pero lo único cierto es que a puerta cerrada seguían las infructuosas negociaciones entre las cabezas de las tribus perredistas.