Amatlán de Los Reyes, Ver.

Julio Sánchez Pasilla toma una varilla de acero de un metro de largo, con punta y empuñadura circular.

Es nuestra herramienta principal, nuestro radar, dice el integrante del grupo Vida, de Coahuila, que forma parte de la primera Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Veracruz: Buscándonos nos Encontramos, que este domingo inició actividades en Amatlán de los Reyes.

Cuando la varilla se hunde fácilmente, tiene rastros de ceniza o huele, es porque ahí hay algo, explica.

Atrás de él, en el piso del salón de usos múltiples de la iglesia de Los Santos Reyes, se observan otras herramientas: picos, palas, machetes, cuerdas, guantes.

En México, donde más de 30 mil personas han desaparecido desde el inicio de la guerra contra el narcotráfico impulsada en el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, el Estado ha sido incapaz de localizar a los ausentes. Y sólo en cuatro estados las familias realizan trabajos de búsqueda: Guerrero, Coahuila, Sinaloa, y Tamaulipas.

En la reunión con familias con desaparecidos en Veracruz, Juan Carlos Trujillo, de la Red de Enlaces Nacionales, dijo que el objetivo de la brigada “es generar un movimiento nacional, en principio, hacer extensivo lo que hacemos, que más gente se una a nosotros, que todo México salga a buscar.

El Estado mexicano no quiere, no puede, no sabe buscar a nuestros desaparecidos. Nosotros nos sumamos para venir a Veracruz y organizar esta brigada: sabemos que buscando muertos rescatamos vivos.

Alma Rosa Rojo, de Voces Unidas por la Vida-Sabuesos, de Sinaloa, precisa: Si alguna persona sabe de alguna fosa clandestina, que nos lo haga saber de manera anónima. No buscamos culpables, buscamos desaparecidos, subrayó.

Desde su llegada a Veracruz (el sábado 9 de abril), cerca de 50 familias se han acercado a la primera Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas para exponer sus casos. En la reunión del domingo hay una veintena de personas, casi todas mujeres, la mayoría de más de 50 años.

Norberto Beristaín, desde una silla en la esquina, se presenta. Busca a su hijo, Guadalupe Beristaín Cozar, de 31 años, desaparecido el 4 de diciembre del 2015. Tuvo que esperar 72 horas para que las autoridades aceptaran la denuncia de desaparición. No hay avances en el caso.

Mario Vergara, de Los Otros Desaparecidos de Iguala, Guerrero, quien ha participado en el hallazgo de 145 cuerpos y cientos de huesos humanos en el sur del país, afirma: Este es el lugar para las personas cansadas de buscar justicia ante el Ministerio Público, que se han cansado de perseguir a las autoridades, que se han cansado de pedir justicia.

Las familias de Veracruz estamos cansadas de tanta mentira, de buscar a nuestros hijos detrás de los escritorios, en papeles. Ahí no los vamos a encontrar. Por eso nos hemos unido en esta brigada, dijo Aracely Salcedo, integrante del Colectivo de Familias de Desaparecidos Córdoba-Orizaba.

Miembros de la primera Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Veracruz: Buscándonos nos Encontramos consideran que Veracruz atraviesa por una fuerte crisis humana, debido a que cuatro de cada 10 desapariciones en el país ocurren en esta entidad.

Veracruz enfrenta una de las peores crisis humana por desapariciones; vemos una cascada de violencia y una total colusión de las autoridades. Las familias no tienen ningún valor, ningún significado para nadie. Por eso estamos aquí, sostiene Juan Carlos Trujillo, de la Red de Enlaces Nacionales.