El gobernador del Banco de México (BdeM), Agustín Carstens, dijo en el Senado que el organismo a su cargo sostiene que el país crecerá este año 3 por ciento, pese a que el Fondo Monetario Internacional (FMI) redujo la previsión a 2.4 por ciento.

En entrevista, luego de su comparecencia con integrantes de la Comisión de Hacienda, agregó que el nuevo pronóstico del Fondo Monetario Internacional (FMI) es una estimación adicional más de las que se tienen; sería importante ver la justificación, que yo aún no he visto. Sería importante ver las razones por las que han revisado la tasa de crecimiento de México, porque no se puede extrapolar en uno a uno el menor crecimiento mundial.

Durante su comparecencia de cuatro horas con los legisladores, insistió en que el pronóstico de crecimiento económico del BdeM para el país, este año, es de 2 a 3 por ciento y para 2017 de 2.5 a 3.5, estimaciones que en buena medida reflejan el pobre crecimiento de la economía mundial que ha estado afectando nuestras exportaciones.

Recalcó también que la tasa de inflación para 2017 se prevé que se mantenga en 3 por ciento, aunque por el momento estamos con una inflación bastante buena, de 2.6 por ciento, sigue por debajo de la meta de 3 por ciento, pero esperamos que durante el transcurso del año la tasa de inflación iría aumentando para converger en 3 por ciento.

Ante los cuestionamientos de los senadores del PRD, Mario Delgado y Armando Ríos Piter, quienes pidieron la información detallada de cuántos recursos de la reserva se perdieron en la estrategia para estabilizar el peso, Carstens precisó: se destinaron 30 mil 277 millones dólares de la reserva monetaria para frenar la depreciación del peso.

Explicó que cuando el BdeM decidió suspender las subastas de dólares fue porque su efecto era menor al esperado, derivado de especulaciones en los mercados en contra de esa medida. Ante ello, explicó, Banxico y Hacienda, decidimos que no vamos a estar acomodando la salida de capitales a través de intervenciones, lo que vamos a hacer es mantener el apetito de inversionistas internacionales y nacionales en títulos mexicanos.

Dolores Padierna, también senadora del PRD, le cuestionó respecto del caso Papeles de Panamá, en respuesta el gobernador del Banco de México dijo: “juzguen al Banco de México por el uso de nuestras facultades, no por aquellas que no tenemos. Ciertamente los documentos de Papeles de Panamá son de preocupación del gobierno, como se ha expresado, pero el BdeM no tiene instrumentos ni responsabilidad para actuar”.

El panista Héctor Larios razonó el hecho de que ciertamente se entregó ayer el monto más alto de remanentes de BdeM a Hacienda, del orden de 240 mil millones de pesos, pero ¿ante una contingencia, si hubiera flujo de valores mexicanos hacia el exterior, entonces tendríamos una presión fuerte porque no tenemos un mecanismo de acumular dólares, tendríamos que ir al mercado a comprarlos, porque Pemex ya no entregará la cantidad de dólares que aportaba.

Carstens manifestó: pensamos que el nivel de reservas se va a mantener bastante bien. Pronosticamos crecimiento de entre 3 y 5 mil millones de dólares. Y aclaró: el BdeM acumula reservas de todo lo que es balanza de pagos del gobierno, no únicamente de Pemex, también si el gobierno federal contrata deuda en dólares, el producto, sobre todo si es un endeudamiento neto positivo, los dólares van a dar al BdeM.

Al final, en entrevista, Carstens aseveró que la propuesta de Donald Trump de retener las remesas que los connacionales violaría el derecho de propiedad, ya que las remesas son de quien las ganó y tienen todo el derecho de transmitirlas internacionalmente.