Sin antecedentes cercanos sobre un movimiento de esa dimensión ni información oficial hasta el momento, el jefe del Estado Mayor Presidencial (EMP), general Roberto Miranda, removió el 15 de este mes a los titulares de las subjefaturas de Logística, de Seguridad y de Administración, las tres instancias de mayor importancia en la jerarquía de ese cuerpo militar encargado de garantizar la protección del presidente de la República, de su familia y de integrantes del gabinete, revelaron diversas fuentes.

Así, el subjefe de Seguridad, general Francisco Javier García Fierro, fue remplazado por el general Enrique Jaramillo; en Administración, el general Crisanto García fue sustituido por el general Marco Antonio Chávez, y de la subjefatura de Logística salió el general Gumaro Cabrera y en su lugar llegó el coronel Román Villalvazo.

Este último cambio destaca sobre todo porque el general Cabrera fue el encargado del operativo de seguridad en la visita del papa Francisco. El propio presidente Enrique Peña Nieto lo felicitó en un acto con el EMP el pasado 18 de febrero en Los Pinos, e incluso fue entrevistado por una televisora sobre la logística durante la estancia del jerarca.

Hasta el momento se desconoce si los tres generales serán asignados a una nueva función dentro de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Los removidos acompañaban al general Miranda desde inicios del sexenio en la estructura del EMP y pertenecían a su círculo de mando y confianza más cercano.

Otro cambio

También fue sustituido el responsable del Hangar presidencial, coronel César Zegbe, y en su lugar entró el también coronel Rubén Ocampo. A propósito de la llegada del nuevo avión presidencial TP-01 José María Morelos y Pavón, el hangar fue sometido a una remodelación que costó mil millones de pesos.

Esta es la segunda ocasión en el sexenio que el EMP remueve a militares de alto rango. En noviembre de 2014, el general Gustavo Ramírez Palacios, entonces encargado de la subjefatura de Seguridad, dejó el cargo luego de que el día 8 de ese mes, y según testimonios gráficos, salió a encarar en estado de ebriedad a manifestantes que quemaron una de las puertas de Palacio Nacional e incluso estuvo involucrado en la agresión física a varios jóvenes.

Ramírez fue enviado a la Sedena y designado jefe del Estado Mayor en la 22 zona militar con sede en Toluca; posteriormente se le nombró agregado militar en la embajada de México en Turquía.