Los trabajadores de la empresa Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV), propiedad de Mexichem, ubicada en el complejo industrial Pajaritos, donde ocurrió la explosión de este miércoles que dejó 13 muertos y decenas de heridos, laboran en condiciones precarias, sin capacitación, tienen hasta que comprar sus uniformes, cubren horarios extendidos con pésimo equipo, prestaciones mínimas, bajos salarios y pagan de sus bolsillos certificados de capacitación.

Denunció lo anterior la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (UNTPP).Puntualizó que la explosión no ocurrió en Pemex, sino en la primera planta petroquímica privatizada, y que en ella gran parte de los trabajadores son de empresas contratistas y laboran en condiciones de precariedad.

Al respecto, trabajadores de PMV, entrevistados vía telefónica, indicaron que en la mañana del día de la explosión, a pesar de que se empezaron a detectar fugas en la planta de Clorados 3, no les dieron la instrucción de que dejaran de laborar o de que salieran de las instalaciones; únicamente les dijeron que estuvieran alertas, y sólo dejaron salir al personal administrativo.

Denunciaron que la empresa los mantuvo en sus áreas de trabajo hasta el momento de la explosión, por lo que dudan de la cifra de muertos, ya que deben ser muchos más, hay muchos desaparecidos; las familias de los obreros deambulan en diversos hospitales buscándolos, pero se quiere minimizar las consecuencias de este desastre.

En una reunión que llevó a cabo ayer, la UNTPP planteó que se quiere hacer creer que es una explosión en Pemex, cuando fue en una empresa privada, la cual tiene cientos de trabajadores contratistas, porque así les sale más barato. Ellos deben comprar su ropa de trabajo, pagan sus certificaciones de cursos en 3 mil o 5 mil pesos para poder subir a plataforma, pero no tienen experiencia, capacitación ni ni equipo. No contratan gente con experiencia porque les resultaría más caro, lo que es indignante, porque tienen contratos muy jugosos.

Detalló que la tragedia no fue mayor porque a la hora de la explosión los trabajadores de las instalaciones de Pemex estaban en cambio de turno y ya habían salido de laborar.

“¿Quién va responsabilizarse y pagar los daños ocasionados al complejo, a los trabajadores, a los familiares de los deudos, y al medio ambiente? Porque fueron las condiciones de pésimo o nulo mantenimiento de esta empresa –de la cual el principal inversionista es Antonio del Valle– las que provocaron esta situación y las que tienen hogares de trabajadores enlutados y otro ciento de ellos en hospitales”, expresó.

Destacó que los empleados de Mexichem y de sus contratistas padecen sobrexplotación laboral, condiciones de trabajo irracionales, no les permiten la libre sindicalización y tienen ingresos y prestaciones muy bajos. “Estos también son los resultados de la reforma energética, la cual está destrozando todo, la industria petrolera y a su capital humano: los trabajadores.

Lo grave es que en la gran mayoría de empresas privadas del sector petrolero los trabajadores padecen las mismas condiciones laborales; estos son los empleos que prometió el gobierno que traería la reforma.