En medio de la polémica por la reciente filtración del padrón de votantes, la Comisión del Registro Federal de Electores del Instituto Nacional Electoral discutirá los nuevos lineamientos para garantizar el derecho a acceso a dicho documento y al listado nominal al que tienen los partidos. En el proyecto, aunque se restringe su posesión a representantes partidistas mediante la Comisión Nacional de Vigilancia –de revisión constante–, se mantiene el esquema de entrega del padrón en procesos federales, por medios magnéticos, imputando responsabilidad a los partidos sobre su buen uso.

La propuesta deberá aprobarla primero la comisión del registro y posteriormente se estima que el miércoles la avalará el Consejo General del INE. El modelo de acceso se proyecta en dos vertientes, una para los partidos en elecciones y otra para las comisiones nacional, locales y distritales de vigilancia del padrón, que podrán revisarlo mediante las terminales de computación dispuestas por la dirección ejecutiva, así como mediante los servicios de consulta ubicados en la vocalía del Registro.

Para el caso, el INE, conforme a las posibilidades técnicas, garantizará el acceso efectivo para que los partidos realicen sus labores. Para ello dispondrá de herramientas informáticas y consulta de bases de datos, así como espacio de procesamiento y almacenamiento por representación partidista. Los partidos políticos podrán solicitar la instalación de herramientas informáticas adicionales.

A fin de garantizar tecnológicamente la protección de los datos personales en posesión del Registro Federal Electoral, la dirección ejecutiva implementará los protocolos y las medidas de seguridad informáticas que considere pertinentes para salvaguardar la protección de la información y su tratamiento.

Sin embargo, el acceso partidista al padrón para la verificación en proceso electoral federal mantiene el esquema de entrega a los partidos por vía electrónica, con los mecanismos de control utilizados hasta ahora: los representantes partidistas acreditados ante la Comisión Nacional de Vigilancia serán responsables del uso o destino de los datos personales contenidos en la Lista Nominal de Electores, y deberán tomar las medidas necesarias para salvaguardar la información que les sea entregada, sin poder darle un uso distinto al de la revisión de la Lista Nominal de Electores de que se trate”.

En la propuesta se fija un plazo de 15 días hábiles tras la conclusión del proceso electoral para que los partidos entreguen a la comisión un informe sobre la devolución y destrucción de dicha documentación proporcionada a los partidos políticos.

Luego de la filtración registrada en días pasados, varios de los consejeros se han pronunciado por controlar aún más la información que les sea entregada a los partidos para salvaguardar la protección de datos personales. Hay pronunciamientos en el sentido de que el padrón y el listado nominal sólo se consulten en las instalaciones del INE y otros que plantean que los partidos reintegren la documentación el mismo día de la jornada electoral, para reducir los riesgos.