matriz de doloren el cerebro
Martes 3 de mayo de 2016, p. 2
Londres.
Un nuevo estudio de investigadores británicos ha puesto en duda teorías anteriores acerca del modo en que experimentamos el dolor.
El estudio, llevado a cabo por científicos del Colegio Universitario de Londres y la Universidad de Reading, se proponía probar la naturaleza de la matriz del dolor
, pauta particular de actividad cerebral que, según se cree, es un indicador confiable del dolor.
En estudios pasados, al escanear el cerebro de participantes sometidos a un dolor, los científicos habían observado en forma consistente que las mismas partes del cerebro se encienden
, lo cual ha conducido a que la idea de la matriz del dolor sea aceptada por muchos.
Sin embargo, el nuevo estudio, publicado en JAMA Neurology, puso en duda esta creencia. Para sus exámenes, los científicos reclutaron a dos personas incapaces de sentir dolor, así como a cuatro sanas, más o menos de la misma edad. Cada uno de los seis participantes fue expuesto a un doloroso piquete de alfiler mientras se observaba su cerebro en una máquina de resonancia magnética. Extrañamente, las personas sin sentido del dolor mostraron la misma pauta de actividad cerebral que las sanas, lo cual puso en duda la aseveración de que la matriz del dolor representa en realidad la sensación dolorosa.
Estímulos que atraen la atención
Tim Salomons, de la Universidad de Reading explica: “Nuestros resultados sugieren que estas pautas no son de hecho ‘respuestas al dolor’, sino a estímulos que atraen la atención, sea que la persona sienta dolor o no.
Al hacer la prueba con personas sin sensación de dolor, podemos descartar categóricamente que estas respuestas sean específicas al dolor. Ellas conservan todas sus demás sensaciones, incluso al toque no doloroso, de modo que la actividad cerebral que se ha llamado matriz del dolor probablemente represente estas sensaciones, en vez del dolor en sí.
En otras palabras, si bien la matriz del dolor puede representar un estímulo doloroso, y puede participar en el procesamiento del dolor, es erróneo hacer un vínculo explícito entre la pauta y la sensación de dolor.
Según John Wood, del Colegio Universitario de Londres, los hallazgos destacan la importancia de no asociar correlación con causalidad. Comentó: Al igual que la sensación de belleza o de dicha, la ubicación precisa de la sensación de dolor en el cerebro sigue siendo elusiva
.
Doug Bolton/ © The Independent/
Traducción: Jorge Anaya