San Salvador Atenco, Méx.

Un grupo de 70 ciclistas realizó la rodada contra el despojo y la represión denominada Vuelta Atenco, con un recorrido de más de 37 kilómetros –de la ciudad de México hacia el poblado de San Salvador Atenco–, para sumarse a la lucha que mantienen los campesinos del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) contra la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Al grito de ¡No están solos! y ¡Tierras sí, aviones no!, los ciclistas arribaron pasadas las 13 horas de este sábado a la explanada principal de San Salvador Atenco. La rodada partió del monumento a Cuauhtémoc en la Ciudad de México.

La rodada ciclista se hace para solidarizarnos con la lucha que tienen los campesinos de Atenco, contra el despojo y la represión. Su lucha es genuina y queremos decirles que tendrán nuestro apoyo para conservar las tierras, expresaron los participantes.

Todos nosotros somos del color del arcoíris, los guardianes e hijos de la madre tierra, los que la defendemos ante el cáncer de las leyes del mercado y la catástrofe, que nos la arrebatan, la enferman y matan.

Dijeron que escucharon y respondieron al llamado de amor y dignidad de la tierra. Porque al despojarnos de nuestros territorios, la vida está en riesgo y los afectados somos todos, por eso ya estamos luchando, pero necesitamos ser más, manifestaron los ciclistas convocados al acto en el marco de la Campaña Nacional en Defensa de la Madre Tierra y el Territorio.

Los ciclistas fueron recibidos por los campesinos del FPDT en la explanada principal de Atenco y tras un breve descanso se trasladaron al poblado de Tocuila, en Texcoco, donde desde el pasado 23 de abril los ejidatarios mantienen un plantón para detener los trabajos de construcción de la autopista Pirámides-Texcoco, que invade sus tierras.

Trinidad Ramírez, integrante del FPDT, dijo a los participantes que su presencia anima la lucha de los ejidatarios. “Nos alienta para seguir adelante para luchar contra todo lo que nos están quitando, nuestras tierras.

Estamos sembrando conciencia, porque queremos que nuestros pueblos de la región despierten y actúen contra las imposiciones, están robando nuestro derecho a la tierra, el agua, la soberanía y la educación, afirmó.

El grupo pasó la noche en el campamento que mantienen los ejidatarios de Atenco y Tocuila en sus tierras y este domingo recorrerán los 37.5 kilómetros de regreso a la Ciudad de México.