El PRI en la Cámara de Diputados pretende que el abandono de adultos mayores se persiga de oficio y se castigue con prisión hasta por cuatro años. También se aplicaría una multa hasta de 100 días de salario mínimo contra quien cometa ese delito.

Dado que las personas de la tercera edad son el cuarto grupo de población más vulnerable en México, Pilar Ortiz Lanz propone una reforma al artículo 335 del Código Penal Federal para que el Ministerio Público (MP) lleve al anciano abandonado al cuidado de la institución que corresponda.

Y si el sujeto responsable del delito fuera ascendiente o tutor, en el caso de menores, el MP promoverá la privación de la patria potestad o de la tutela, así como la designación de un tutor especial.

Actualmente, la ley sólo contempla como susceptibles del delito de abandono a niños y personas con enfermedades que necesitan de cuidados especiales, el cual es castigado con pena de prisión de un mes a cuatro años.

Los adultos mayores son un sector que ha crecido de forma importante, el cual, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México 2010, ocupa la cuarta posición como grupo de población más vulnerable en territorio nacional.

En nuestro país, 10 de cada 100 mexicanos han cumplido 60 años o más. El Consejo Nacional de Población estima que para 2050, 30 por ciento de los habitantes tendrán más de seis décadas, puntualiza la iniciativa.

El texto indica que los adultos mayores son un conjunto social vulnerable por edad, que se suma a otros grupos que por circunstancias de pobreza, origen étnico, estado de salud, género o discapacidad se ubican en estado de indefensión o de mayor dificultad para hacer frente a la vida cotidiana.

Datos del Consejo Nacional de Población 2010 señalan que en México hay 10.5 millones de personas mayores de 60 años, lo que representa a nueve de cada 100, y se estima que para 2030 habrá más adultos mayores que jóvenes menores de 15 años, destaca el texto.

A la fecha, no existen estadísticas ciertas en torno al maltrato y la violencia que sufren los adultos mayores y, en especial, sobre aquellos que no les es posible cuidarse a sí mismos y que han llegado a ser abandonados por quienes tienen el deber de cuidarlos.