Atrás de la ofensiva contra la jefa delegacional de Tlalpan, Claudia Sheinbaum, está un grupo político con intereses económicos formado por los ex titulares de esa demarcación, Higinio Chávez, Guillermo Sánchez y Héctor Hugo Hernández, acusó el presidente de Morena en la Ciudad de México, Martí Batres.

En conferencia de prensa, dijo que en sus gestiones, los tres perredistas expidieron permisos para construir gasolinerías, de las que son propietarios, además de que permitieron la proliferación de gaseras clandestinas.

Agregó que este grupo tiene conexión con la Secretaría de Movilidad, toda vez que, aseguró, Héctor Hugo Hernández es funcionario de esa dependencia y el hilo de comunicación con el director del Servicio de Transportes Eléctricos, Eduardo Venadero.

Batres recordó que al ex delegado interino se le ha vinculado con quien fue alcalde de Iguala, Guerrero, José Luis Abarca, involucrado en la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa; además, es investigado por el gobierno de la ciudad por el endeudamiento ilegal que dejó por 77 millones de pesos.

También criticó que el líder del sol azteca, Raúl Flores, ahora defienda a Toribio Guzmán, candidato perredista a dirigir el consejo de pueblos originarios de Tlalpan, cuando en marzo de 2015 se deslindó de él, al estar involucrado con una gasera clandestina que fue clausurada en la gestión de Maricela Contreras.