Sólo en lo que va del presente año siete periodistas han sido asesinados en el país. El último se cometió contra Manuel Torres González, director del portal NoticiasMT, el 14 de mayo en Poza Rica, Veracruz, representa el 114 desde el año 2000.

De acuerdo con datos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), 20 comunicadores están desaparecidos desde el año 2000 y existen 49 denuncias por atentados contra medios de información en los pasados 10 años. Todo ello en medio de la impunidad de más de 90 por ciento de los casos.

Con motivo del Día Internacional de la Libertad de Expresión, el organismo nacional señaló que la protección e independencia en el ejercicio periodístico son elementos esenciales para el pleno ejercicio de ésta y el fortalecimiento del debate público.

Exhortó una vez más a las autoridades a cumplir las normas de protección a informadores y a entender esa profesión como coadyuvante del modelo democrático en nuestro país, no como amenaza para el desarrollo institucional.

Estrategia integral

Para ello, agregó, la estrategia de prevención de agravios a periodistas debe ser integral, por lo que se deben atender los factores de riesgo y fortalecer las instituciones para que den respuesta efectiva a los casos de violencia.

Sin embargo, aunque reconoció los avances normativos y mayor apertura a la crítica, dijo que tampoco se pueden ignorar las amenazas e intentos por coartar la libertad de expresión, que han convertido a México en uno de los países con mayor número de agresiones.

Subrayó que esos agravios contra comunicadores y medios informativos han derivado en autocensura, desplazamiento y exilio forzado. Asimismo, generación de espacios de silencio en el país y vulneración de los principios fundamentales de una sociedad abierta, plural y democrática.

Además, se observa que autoridades, poderes fácticos –especialmente los relacionados con el crimen organizado– y particulares se han convertido en censores de los medios ante las investigaciones que realizan sobre delincuencia organizada y narcotráfico.

En su recomendación general 24, sobre el ejercicio de la libertad de expresión en México, la CNDH solicitó a las procuradurías y fiscalías generales de justicia del país, entre otras cuestiones, promover la creación de unidades especializadas en la investigación y persecución de delitos cometidos en contra de la labor periodística.