Guanajuato, Gto.

El gobernador panista del estado, Miguel Márquez Márquez, pidió que lo investigue la FBI (Oficina Federal de Investigaciones) y la CIA (Agencia Central de Inteligencia) sobre la compra de los terrenos para la empresa Toyota porque el que nada debe, nada teme.

No le demos vueltas, que me investiguen la FBI, la CIA, ¿quién más quieren?, para eso están los órganos de control, si van hacer auditoría, que la hagan, yo mismo la pediría, sin ningún problema, expresó.

Desde abril pasado ejidatarios de Caleras de Ameche, municipio de Apaseo El Grande, han mostrado inconformidad porque la empresa Jaos, de Monterrey, Nuevo León, acaparó más de 200 hectáreas de las 607 donde se instalará la armadora; además, acusaron al gobierno de intimidarlos para que vendan sus parcelas.

El Grupo Garza Ponce, de Monterrey, dueño de Jaos, compró en 180 mil pesos cada hectárea a los campesinos y las vendieron al gobierno del estado en un millón 450 mil pesos.

Hay suspicacias, no entraré en detalles ni declararé más, está apegado a la norma, la conciencia tranquila de estar haciendo un bien para Guanajuato, reiteró Márquez Márquez.

Agregó que la instalación de Toyota en Guanajuato es un proyecto internacional, que su administración ejecuta con mucho respeto para los guanajuatenses.

Se trata de una empresa internacional, que si se establece aquí es por la confianza que nunca vamos a romper. Trabajaremos con mucha ética, enfatizó.

En un comunicado, la empresa Toyota se deslindó de la compra de los terrenos donde se instalará próximamente, y aclaró que las gestiones de adquisición del predio las efectúa el gobierno del estado en forma directa con los particulares.