Buenos Aires.

El paro de 48 horas que iniciaron este viernes los controladores aéreos de la Asociación de Trabajadores del Estado en la madrugada de este viernes afectó los vuelos en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza y el Aeropuerto Nacional Jorge Newbery, en esta capital argentina.

El paro abarca a todas las aerostaciones del país para exigir que se reinicie la discusión salarial en el sector de acuerdo a un comunicado donde ATE denuncia que "el gobierno nacional, de forma ilegal, quiere imponer, de la mano de un sindicato patronal, que es la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación, un convenio empresarial para los servicios de navegación aérea, generando las condiciones previas para una inminente privatización”.

Se advierte que este convenio conserva, en su esencia, la matriz del régimen privado de las relaciones laborales, agregando más elementos flexibilizadores. Martín Taborda, delegado gremial sostuvo que nos quieren pasar a una empresa privada, perdiendo todos los beneficios que tenemos.

A seis meses de haber asumido el gobierno el derechista presidente Mauricio Macri, de la Alianza Cambiemos, la protesta social aumenta en acciones y movilizaciones en todo el país; y es cuidadosamente ocultada por los medios masivos de comunicación, lo que es denunciado por diversos sectores políticos y sociales.

Por estas horas varios movimientos sociales se unieron para realizar un plan de lucha nacional, instalando ollas populares en diversas provincias y alrededor del emblemático Obelisco capitalino, reclamando trabajo genuino, aumento en los salarios de los trabajadores precarizados y de la economía social, así como el abasto de alimentos para los comedores populares de todo el país, que están pasando una situación de extrema gravedad.

Le estamos diciendo al gobierno nacional que no existe 'pobreza cero' para nada, que hay hambre en los barrios, que queremos trabajo, y que necesitamos con urgencia alimentos y medicamentos para hacer frente a la crisis económica, dijo Felipa Azurduy, vocera del Frente Popular Darío Santillán-Corriente Nacional.

Otros dirigentes recordaron que en seis meses suman 200 mil los despedidos en todo el país, que al llegar las tarifas con aumentos imposibles de pagar en lo que llaman el tarifazo más grande y disparatado en la historia del país y , según nos informamos, en el mundo. Además con aumentos día por día de la inflación, caída de la industria y el comercio, con más de dos millones de pobres y ante esto, la respuesta es la indiferencia y una insensibilidad que asusta.

En tanto, por una orden del juez federal Luis Rodríguez, la Policía Federal realizó ayer un operativo en las oficinas del Ministerio de Energía, cuyo titular Juan José Aranguren es investigado en una causa “por negociaciones incompatibles con su cargo, abuso de autoridad y violación de los deberes de funcionario público.

El fiscal Carlos Stornelli, quien imputó a Aranguren solicitó el allanamiento por haber beneficiado a la petrolera Shell, empresa de la que fue gerente general y en la que posee acciones por valor de 16 millones de pesos.

También hubo operativos en las oficinas de Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPR) en esta capital. Aranguren fue acusado junto a Pablo Popik, subsecretario de Refinación y Comercialización, y José Luis Sureda, secretario de Combustibles, por haber beneficiado a Shell mediante el otorgamiento de varias licitaciones de la estatal YPF.

También está imputado por autorizar al Ente Nacional Regulador del Gas aumentar las tarifas y por la importación de gas desde Chile, ya que una subsidiaria de Shell (British Gas) participa de la operación.

Macri reconoció este viernes que no han sido fáciles estos seis meses, pero insistió en que su gobierno está en el camino correcto y llamó a no escuchar a las minorías, que dicen que todo está mal; y que había encontrado un país temeroso del mundo, no teníamos relaciones con los países, salvo Venezuela, y ahora nos hemos sentado con los líderes del mundo.

En este caso hay una fuerte preocupación no sólo local sino de países que participan de los organismos de integración regional, por la decisión de Macri de ingresar como observador a la cumbre del próximo 1o de julio en Chile en la XV reunión del consejo de ministros de la Alianza del Pacífico lo que es analizado aquí como un golpe a los bloques de integración latinoamericanos y otro acercamiento a Washington.