Los buenos resultados del 5 de junio le permitieron a Morena declararse ayer en condiciones de afrontar con éxito la sucesión presidencial de 2018, pero antes, explicó Andrés Manuel López Obrador, el partido debe consolidar su organización territorial y la alianza con los ciudadanos.

En el Hemiciclo a Juárez y ante el cariz que tomó la respuesta oficial hacia el magisterio, el presidente de Morena anunció una movilización el domingo 26 de junio, en respaldo a los maestros disidentes y expresó su rechazo a la detención de los dirigentes de la sección 22 de Oaxaca, Rubén Núñez y Francisco Villalobos, arresto que definió como una acción cobarde y de corte dictatorial, propia de rufianes.

La marcha saldrá del Ángel de la Independencia al Zócalo. López Obrador citó a la dirigencia de Morena a una reunión urgente mañana por la tarde en el salón D’Luz, en la colonia Roma, para afinar los detalles. Vamos a defender a los maestros. ¡No están solos!, resaltó.

Por la noche, en su cuenta de Twitter, Andrés Manuel López Obrador, escribió: “@lopezobrador_ : ‘Reforma Educativa’ y manipulación aparte, levantar a maestros y trasladarlos en un avión militar a una cárcel del norte, es neofascismo”.

Ayer, a la asamblea informativa de Morena se convocó para un homenaje a los candidatos a gobernador y a la Asamblea Constituyente de la capital. El ex candidato presidencial extendió el reconocimiento a los promotores del voto y a los ciudadanos. “A los que llamamos con cariño los solovinos, que se suman por su propia voluntad, sin ser acarreados”.

¡Como yo!, exclamó una mujer desde abajo del templete.

López Obrador celebró que Morena logró sumar 2.5 millones de votos, 700 mil más que el año pasado, a pesar de que los otros partidos y el gobierno trataron de aplastarnos. Nos ganamos a pulso la condición de tercera fuerza electoral, pero de primera en política y moral del país, dijo.

Se unieron todos los integrantes de la mafia, como es su costumbre, para tratar de aplastarnos. Salimos ilesos de la refriega. No pudieron con Morena. ¡Cómo no voy a estar feliz!, expresó.

Una vez más ponderó que Morena es el único partido que para ganar votos no reparte despensas ni frijol con gorgojo; no hace trampas, no practica la guerra sucia y no comete fraudes electorales. Otra vez, desde abajo del templete, y en una frase que ya se volvió de uso corriente, le completaron: ¡No lo tiene ni Obama!

También se ufanó de la alta votación para Morena en la Ciudad de México e hizo un reconocimiento especial a los candidatos a la Constituyente, y citó entre otros a Carlos Payán, director fundador de La Jornada; los actores Bruno Bichir, Demián Alcázar y Héctor Bonilla; a Lilia Rossbach, Jaime Cárdenas Gracia, Mardonio Carballo y Javier Jiménez Espriú.

López Obrador reconoció que a media tarde se preocupó por la baja participación en las urnas de la ciudadanía de la capital. Porque, refirió, en una reducida votación, con lo que otros partidos acarrean, compran conciencias y lealtades, pueden ganar.

En la noche, sin embargo, ¡qué agradable sorpresa. Les ganamos con 80 mil votos de ventaja, gracias a los ciudadanos. ¡Cómo no voy a estar contento!

Lo que sigue, dijo, es la elección de 2017 en entidades como Nayarit, Coahuila y el estado de México, y luego 2018, la cita con la historia.

En ese año, además, se volverá a dar la elección en Veracruz. ¿A poco creen que les vamos a dejar libre el terreno en ese estado? No les va a funcionar el pacto a (Miguel Ángel Osorio) Chong y a (Felipe) Calderón que orquestaron en esa entidad. ¿A poco creen que nos chupamos el dedo?

En la asamblea se presentó a tres de los 12 candidatos de Morena: David Monreal, Salomón Jara y Cuitláhuac García Jiménez, de Zacatecas, Oaxaca y Veracruz, respectivamente. Este último, que resultó el de mayor votación, ayer fue el más solicitado.

¿Por qué te dejaste ganar?, exclamó un hombre entre los asistentes.

¡No se dejó! Le robaron, gritó otro, a su lado.

García Jiménez confirmó que se impugnará el resultado, pero que no se llevará al estado a un conflicto poselectoral.

Anunció que se insistirá en exigir el juicio político contra el gobernador Javier Duarte de Ochoa y se le dé trámite a la investigación realizada por la Auditoría Superior de la Federación contra 29 funcionarios de ese gobierno, que fue congelada por la fiscalía estatal.