Estambul.

Los tres sospechosos de haber perpetrado el atentado en el aeropuerto internacional de Atarturk en esta ciudad, con saldo nuevo de 44 muertos y más de 200 heridos, provenían de Rusia, Uzbekistán y Kirguistán y pertenecían al Estado Islámico, informaron este jueves fuertes gubernamentales al tiempo que 13 personas fueron detenidas por su presunta implicación en el ataque.

Entre los detenidos hay tres extranjeros sospechosos de estar vinculados con el ataque del pasado martes, cuando cerca de la 10 de la noche uno de los tres hombres disparó un rifle de asalto AK-47 en una de las terminales del aeropuerto antes de que él y sus compañeros se hicieran estallar con las bombas que llevaban consigo.

Un alto responsable que no quiso dar su nombre explicó a la Afp que los suicidas venían de Rusia, de Uzbekistán y de Kirguistán.

Más extranjeros de los que se creía en un principio figuraban entre las víctimas mortales. De las 44 personas que perdieron la vida en este ataque, 19 son ciudadanos extranjeros, según el ministro del Interior turco, Efkan Ala.

En otro frente bélico en la región, milicianos del Talibán lanzaron ataques suicidas contra un convoy de cadetes policiales afganos, con un saldo de unos 40 muertos, en su mayoría policías, junto con cuatro civiles, y otros tantos heridos, informaron fuentes oficiales. El ataque ocurrió en el distrito de Pagmán, a unos 20 kilómetros al oeste de Kabul, dijo Musa Ramati, el gobernador del la demarcación. El vocero talibán, Zabiullah Mujaid se responsabilizó de este ataque, ejecutado por dos combatientes.

En Siria, cerca de 30 combatientes del gobierno de Bashar Al Assad , y 39 de los movimientos rebeldes murieron en 24 horas durante enfrentamientos favorables a los insurgentes en el norte de Siria, afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres.