Senadores del PRD advirtieron que el gobierno federal faltó al compromiso que formuló durante la negociación de la reforma energética de no incrementar el precio de la gasolina, por el contrario, continuará la elevación de ese combustible, sobre todo con la entrada de empresas extranjeras, lo que representa otro golpe a la economía familiar.

El gobierno de Enrique Peña Nieto ofreció que no sólo no subiría, sino que bajaría de precio, pero la realidad es que tenemos gasolina de muy mala calidad a precios elevadísimos en comparación con el mercado internacional, resaltó el senador perredista Mario Delgado.

Su compañera de bancada, Dolores Padierna, resaltó que con ese incremento de 24 y 34 centavos en las gasolinas Magna y Premium, el costo del combustible ya es menor en Estados Unidos.

“Que quede claro: nunca les creímos que la gasolina iba a bajar de precio, por el contrario advertimos que regresarían los gasolinazos”, recalcó el senador Delgado. Hizo notar que la economía mexicana pasó de la petrolización de la década pasada a la gasolinización en esta administración.

Ello, explicó, debido a que con el impuesto especial sobre productos y servicios (IEPS) a la gasolina “ha sido una de las fuentes principales de ingresos para el gobierno. En 2015 con este impuesto el gobierno recaudó 220 mil millones de pesos, casi el presupuesto de las secretarías de Desarrollo Social y de Salud.

La senadora Padierna sostuvo que el alza de los precios de las gasolinas que ha decretado la Secretaría de Hacienda y que seguramente seguirá aplicando durante los siguientes meses, tiene como propósitos mantener el nivel de recaudación del IEPS y preparar el terreno para que el incremento de precios que casi inevitablemente ocurrirá cuando concluya la liberalización del mercado, no sea tan abrupto.

Detalló que a partir de abril, se liberó la importación y comercialización de gasolinas y adicionalmente, a partir de 2018 se liberarán los precios, lo que hará que los precios al público aumenten , debido a que el precio de referencia que utiliza la Secretaría de Hacienda como dato básico para determinar el precio al público, se sustituirá por el precio de la gasolina importada.

En mayo de 2016, último dato disponible, el precio promedio de las gasolinas importadas fue de 7.64 pesos por litro, contra 5.45 del precio de referencia y los importadores s privados definitivamente utilizarán el precio de importación.