Veracruz, Ver.

Empresarios integrantes del Observatorio y Contraloría Ciudadana AC desconocieron a Javier Duarte de Ochoa como gobernador de Veracruz.

El presidente de la organización no gubernamental, Mario Arenas Serdán, indicó que tomaron esta decisión porque la administración de Duarte de Ochoa no paga a sus proveedores, y por los desvíos de recursos documentados por la Auditoría Superior de la Federación en las cuentas públicas de 2011, 2012, 2013 y 2014. Además, citó investigaciones periodísticas sobre la creación de empresas fantasmas a través de las cuales también se habrían desviado fondos públicos.

Consideró que el priísta encabeza un gobierno que se ha dedicado a endeudar al estado y malversar recursos de los veracruzanos, por eso nosotros, los miembros del Observatorio y Contraloría Ciudadana, quienes representamos a miles de veracruzanos, desconocemos a Javier Duarte como gobernador.

Los empresarios además exigieron –como ya lo hizo el gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares– al presidente Enrique Peña Nieto que intervenga ante las medidas que está tomando la administración de Duarte de Ochoa; de lo contrario, se convertirá en cómplice de la impunidad.

Información presentada por el coordinador del Observatorio de las Finanzas Públicas de la Universidad Veracruzana, Hilario Barcelata Chávez, indica que el estado de Veracruz tiene adeudos bancarios y bursátiles que suman 127 mil millones de pesos. De esa cifra, más de 43 mil 554 millones de pesos corresponden a deuda por devolución de recursos federales no utilizados por el gobierno estatal.

Hasta 2014 la Auditoría Superior de la Federación había hecho observaciones por el presunto uso irregular de 9 mil 557 millones de pesos y sólo se ha aclarado el destino de 5 mil millones, según análisis presentados por Barcelata Chávez.

Los integrantes de Observatorio y Contraloría Ciudadana AC adelantaron que en un par de semanas denunciarán al gobernador veracruzano por la vía penal por desvío de recursos mediante empresas fantasmas.

Arenas Serdán indicó que el desvío de recursos no sólo afecta a los empresarios que terminaron en quiebra por falta de pago, sino a todos los ciudadanos, que padecen una ola de secuestros, extorsiones y asesinatos.