La educación tecnológica es una de las apuestas del Gobierno de la Ciudad de México para alcanzar la meta de cero rechazados en bachillerato y licenciatura que se ha impuesto la administración de Miguel Ángel Mancera, por lo que será incluida como una de las opciones del programa Educación por ti, que este año ofrecerá más de 20 mil lugares a jóvenes que no sean admitidos en esos niveles.

Por ello, ayer, la Secretaría de Educación capitalina firmó un convenio con el Tecnológico Nacional de México (TecNM) –órgano desconcentrado que coordina esas escuelas en el país–, en el que éste último se compromete a abrir 5 mil lugares para estudiantes capitalinos rechazados, a los que la dependencia local otorgará becas.

El TecNM ofrece 17 carreras cortas, específicamente ingenierías, y 12 planteles en la capital; aunado a ello, en 10 de las 20 preparatorias del Instituto de Educación Media Superior de la ciudad, 900 jóvenes podrán estudiar una de las cinco carreras cortas de técnico superior universitario.

Lo anterior forma parte del programa Educación por ti, que el año pasado benefició a más de 15 mil estudiantes rechazados con plazas de educación a distancia y becas en universidades privadas, principalmente, y cuya estrategia para este año fue presentada ayer por Mancera, quien señaló que la educación tecnológica es una opción que permite a los jóvenes incorporarse a los procesos productivos, sin que tengan que estudiar carreras de seis años, y amplía la oferta educativa.

En ese acto, realizado en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, estuvo presente el subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Salvador Jara Guerrero, quien también se manifestó por impulsar la educación tecnológica, pues los jóvenes siguen optando por carreras tradicionales que tienen muy pocas oportunidades de empleo o con muy bajos salarios.

La titular de la Secretaría de Educación capitalina, Alejandra Barrales, insistió en que el principal objetivo del programa Educación por ti es que haya cero rechazados, pero, al mismo tiempo, garantizar la permanencia de los estudiantes en las aulas y vincularlos con las fuentes de empleo relacionadas con lo que estudiaron.