Por tercera ocasión en menos de un mes, el presidente Enrique Peña Nieto viajará al extranjero. Hoy parte hacia Lima, Perú, para asistir a la toma de posesión del nuevo Ejecutivo de aquel país, Pedro Pablo Kuczynski, y el viernes realizará una rápida visita de Estado a Argentina.

En el primer caso, Peña Nieto participará el jueves en las ceremonias de cambio de poderes, también en su condición de socio de Perú –con Chile y Colombia– de la Alianza del Pacífico.

Apenas el pasado primero de este mes, en Puerto Varas, Chile, el mandatario mexicano participó en la 11 cumbre de ese organismo, a la cual asistió el presidente peruano saliente, Ollanta Humala, y el electo, Kuczynski.

Esta vez, el presidente Peña asistirá a las ceremonias que tendrán lugar en la sede del Congreso Nacional y en la Casa Pizarro. Hasta ahora se tiene confirmada también la presencia de los presidentes de Chile, Colombia, Paraguay, Ecuador y Argentina, así como del ex monarca español Juan Carlos I.

El mismo día, el avión presidencial José María Morelos volará a la capital argentina, donde el viernes el Ejecutivo desahogará una apretada agenda con todos los actos protocolarios a los cuales por lo general se destinan dos días.

De acuerdo con un programa preliminar, en sólo unas horas el mandatario colocará una ofrenda floral en el Altar a la Patria y recibirá las llaves de la ciudad de Buenos Aires.

En seguida, en la Casa Rosada tendría una sesión privada de conversaciones con su homólogo, Mauricio Macri, otra en la que intervendrían sus comitivas y una sesión en que darían un mensaje a los medios de comunicación y serían testigos de la firma de acuerdos bilaterales en materias comercial, ambiente, cultura y academia. Después, Peña Nieto se trasladaría a la Corte Suprema y más tarde participaría en el cierre de trabajos de un foro económico donde participarán empresarios de México y Argentina.

Aunque no se ha hecho explícito, diversos reportes mencionan la intención de Peña Nieto y Macri de aprovechar este encuentro para relanzar la relación bilateral que, en efecto, no fue de mucha intensidad durante el mandato de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

De hecho, como presidente electo, Peña visitó en la Casa Rosada a la ahora ex mandataria, y nunca volvieron a tener mayor acercamiento que sus coincidencias en reuniones cumbres y foros multinacionales.

Con Macri ha sido distinto. A menos de un año de este político en la presidencia de su país se ha visto con Peña Nieto ya en cuatro ocasiones, la última precisamente en la Cumbre de la Alianza del Pacífico en la región de Los Lagos, en Chile, a finales de junio, donde el mandatario argentino ratificó su intención de formar parte de este grupo de naciones.

El mandatario regresaría a la Ciudad de México en la noche del viernes o madrugada del sábado.