La AmCham dio a conocer un informe basado en una encuesta entre sus asociados
Enumera estados y municipios con mayores desafíos en seguridad para las compañías
Los ataques a la cadena logística y la extorsión se cuentan entre otras graves amenazas externas
Jueves 28 de julio de 2016, p. 20
En México la corrupción de las autoridades es considerada la principal amenaza externa
que enfrentan las empresas asociadas a la Cámara Americana de Comercio (AmCham) y otros organismos empresariales nacionales y extranjeros, incluso por encima de secuestros, robos, extorsiones, fraudes o la violencia. Además, una quinta parte señala que la impunidad ha contribuido al deterioro de la seguridad para sus compañías, revela el séptimo Informe de seguridad empresarial: Retos y tendencias 2015-2016.
Ayer miércoles la cámara divulgó el reporte, que está basado en una encuesta que aplicó del 9 de febrero al 11 de marzo de este año, entre una muestra de sus empresas asociadas y otras pertenecientes a las cámaras de comercio de Canadá, Gran Bretaña y Japón, así como de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
La Amcham identificó también diez estados con mayores desafíos en materia de seguridad empresarial: Tamaulipas, Estado de México, Michoacán, Ciudad de México, Nuevo León, Guerrero, Jalisco, Veracruz, Sinaloa y Coahuila. En cuanto a municipios con ese problema señaló que la lista la encabeza Reynosa, seguido de Ecatepec, Iztapalapa, Monterrey, Morelia, Guadalajara, Acapulco, Veracruz, Torreón y Culiacán.
Sobre las principales amenazas externas que enfrentan las empresas puntualizó que son la corrupción de las autoridades, los ataques a la cadena logística y los episodios de extorsión
.
Las gráficas del informe de la AmCham muestran que la corrupción de las autoridades ocupa el primer lugar en la lista de amenazas externas, toda vez que 50 por ciento de los entrevistados la considera de alto riesgo. Para otro 32 por ciento es un riesgo medio, y sólo 18 por ciento opinó que se trata de una amenaza de riesgo bajo.
Enseguida se ubican los ataques en el transporte o a las cadenas de suministro, considerados de alto riesgo por 46 por ciento de los entrevistados; la extorsión con 45, y la impunidad con 44 por ciento. En tanto, el robo externo se ubica en el quinto lugar de las amenazas externas para el sector privado y 42 por ciento considera que tiene un riesgo alto, seguido del secuestro con 40 por ciento, la violencia cercana a la zona de empleo con 35 por ciento y el robo de información con 26 por ciento.
La violencia cercana a la zona de empleo se ubica en el séptimo lugar de las amenazas, y entre los entrevistados 36 por ciento la califican de nivel medio, mientras 35 por ciento sostiene que es alto. La intrusión en las instalaciones es riesgo medio para 33 por ciento contra 26 por ciento que lo considera grave, mientras el fraude interno es señalado como una amenaza de bajo riesgo para 45 por ciento.
El estudio compara también si los factores que las empresas consideran que han contribuido al deterioro de su seguridad han subido o bajado en relación con los resultados que la AmCham obtuvo entre 2015 y 2016.
La corrupción de las autoridades en general y también la impunidad se ubican en el segundo y tercer sitios de los principales factores que contribuyen al deterioro de las seguridad empresarial; así son considerados, en cada caso, por 19 por ciento de los entrevistados contra 21 por ciento del periodo anterior.