Guadalajara, Jal.

Al menos mil indígenas wixaritari estarán presentes en el acto que autoridades del Tribunal Agrario llevarán a cabo el próximo 22 de septiembre para que les restituyan 184 hectáreas de su territorio ancestral, las cuales fueron invadidas por ganaderos y agricultores de Huajimic, Nayarit.

Esta es la primera restitución de tierras que habitantes de esa comunidad obtienen en tribunales, luego de que hace 10 años entablaron 47 juicios para recuperar un total de 10 mil hectáreas en esa zona colindante con el norte de Jalisco, informaron líderes de San Sebastián Teponahuaxtlán y Tuxpan de Bolaños.

Señalaron que realizarán una caminata de dos horas el 22 de septiembre para arribar al lugar en grupo y entrarán en posesión con el fallo judicial en mano, y con o sin la presencia de autoridades. Las resorteras no nos van a faltar, dijo Ubaldo Valdez Castañeda, secretario de bienes comunales de los wixaritari.

La comunidad ha previsto varios temas de seguridad para ese día. Estamos conscientes de las consecuencias que puede traer que el Estado mexicano no cumpla con sus funciones, porque hay que decirlo: no cumple, pero la comunidad está preparada, agregó.

Los líderes wixaritari hicieron un exhorto al gobierno federal para que envíe policías y elementos del Ejército para que vigilen antes, durante y después de la ejecución forzosa y garanticen la paz tras ser restituidos los terrenos, pues hoy están en posesión de productores agropecuarios de la entidad nayarita.

Miguel Vázquez Torres, presidente del comisariado de bienes comunales, dijo que además de tomar posesión de las 184 hectáreas, ese mismo día los indígenas se quedarán en el lugar conocido como Piedra Bola y Bola Negra y comenzarán a construir viviendas en esas tierras fértiles.

El abogado de la comunidad indígena, Rubén Ávila Tena, señaló que esperan que se realice sin contratiempos la ejecución asentada en el expediente 769/2012 tramitada ante el Tribunal Unitario Agrario distrito 15.

Reiteró que si las autoridades federales y de los estados de Nayarit y Jalisco no intervienen para prevenir actos violentos, podrían desatarse violencia si los ganaderos se niegan a entregar las tierras.

Los representantes indígenas también hicieron un llamado para que observadores nacionales e internacionales interesados, acudan a la zona el día 22 y atestigüen la disposición pacífica de los wixaritari y la respuesta tanto de ganaderos como de autoridades al proceso ejecutorio.

Las 10 mil hectáreas reclamadas por los wixaritari son la última parte de su territorio invadido en Nayarit desde la primera mitad del siglo pasado, cuando ganaderos mestizos llegaron a la zona y rentaron tierras a los indígenas o las invadieron y expulsaron a los wixaritaris quemando sus propiedades.