Cuernavaca, Mor., Una juez federal vinculó a proceso penal a las dos mujeres identificadas con las iniciales LAV y CSS aprehendidas en la casa donde se capturó al narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán el pasado 8 de enero en Los Mochis, Sinaloa. La defensa alegó que de las mujeres, acusadas de delincuencia organizada y portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, realizaban trabajo doméstico en el lugar y hacían la comida del capo. Este dicho fue corroborado por uno de los dos hombres detenidos el mismo día. La ley no prohíbe que trabajen. Acompañar al peor criminal no las hace criminales, señaló su abogado.