A partir de ayer miércoles una flotilla de Ford Fusion autónomos recogerá a pasajeros de Uber que decidieron participar en el programa piloto. Se trata de unidades Ford Fusion dotadas con radar láser, cámaras y otros sensores. Aunque los autos están cargados de tecnología que les permite navegar por su cuenta, Uber envía en cada automóvil dos técnicos, uno para mantener las manos cerca del volante para intervenir en una eventual situación difícil, mientras el segundo vigila otros aspectos. En una de las pruebas, la computadora del vehículo de Uber detectó un inminente choque, activó los frenos y luego siguió su trayecto. Uno podría pensar que un recorrido por Pittsburgh en un automóvil sin conductor podría estar cargado de momentos de peligro, pero en realidad parecía haber menos incidentes en los vehículos autónomos, narró un periodista de Afp. El vehículo circula como conducido por un abuelo de 80 años. Mantiene una muy prudente distancia del auto que va adelante y se detiene también a distancia.