Ni una más, ni una menos
as cifras de feminicidios en México se incrementan al tiempo que se dificulta la manera de demostrar que se trata de crímenes de odio contra las mujeres, independientemente de su condición social. El estado de México y Puebla ocupan los primeros lugares de una práctica que se extiende en todo el territorio, pues si no hay voluntad política para reconocerla mucho menos para erradicarla.
En Puebla se han registrado 202 casos de feminicidios, 63 de ellos durante 2016, cifras contundentes que presenta el Observatorio de Violencia Social y de Género del estado, más que suficientes para activar la Alerta de Violencia de Género (AVG). En esta entidad en los pasados tres años sólo se ha emitido una sentencia, lo que muestra la falta de interés y de responsabilidad pública.
El incremento de las distintas violencias contra las mujeres en Puebla ha provocado que varias organizaciones exijan investigaciones serias sobre casos como el reciente asesinato de Tania N. Verónica Luna, con personal capacitado en violencia contra las mujeres y niñas. Aunque lo más importante sigue siendo la prevención de la violencia, y para esto se requiere una política de Estado, no el ocultamiento de las cifras y la falta de reconocimiento de un mal que prevalece en el país, donde se responsabiliza a las víctimas a partir de estereotipos de género
, como bien advierte Miriam Pascual, abogada de la Red Retoño.
Pascual explica que aunque está tipificado el delito en Puebla, se vuelve letra muerta, ya que no hay un protocolo de investigación ni voluntad de hacer los ajustes
. ¿Cómo comprobar que el odio es factor del crimen como la ley lo exige? ¿De qué forma probar que Tania Verónica Luna, joven de 23 años, fue asesinada por odio?
Las alarmas del feminicidio se encendieron en Ciudad Juárez hace más de dos décadas. Hoy abarcan casi la totalidad del territorio, siendo Puebla uno de los estados más peligrosos para las mujeres. Aquí no se garantiza la vida libre de violencia de género, por lo que se debe empezar por la declaración de la Alerta, con el fin de que esta entidad deje de pertenecer a la lista de 17 estados que no cuentan con la obligatoriedad de emitir y aplicar protocolos de investigación con perspectiva de género del feminicidio.
En México cada día son asesinadas siete mujeres y niñas por violencia de género, lo que coloca a nuestro país en la posición número 16 del mundo. Estamos hablando de una emergencia nacional. Atacar de raíz las causas del odio hacia las mujeres, prevenir el feminicidio, sancionarlo y combatirlo es lo que procede. Ni una más. Ni una menos.