Jueves 13 de octubre de 2016, p. 34
La cancelación de 10 mil 200 millones de pesos de recursos federales del ramo 23 en el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2017 afectará los fondos de Capitalidad, Metropolitano, de Accesibilidad de las Personas con Discapacidad y los proyectos de desarrollo regional.
En el anuncio del foro Desafíos de infraestructura para el futuro de la Ciudad de México, el 26 de octubre, el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Francisco Solares, señaló que con ello se dejarían de repavimentar las calles de la delegación Cuauhtémoc y se cancelarían los proyectos de desarrollo e infraestructura social en las demarcaciones.
Asimismo, se verán afectadas cuestiones culturales, de medio ambiente, de ciencia y tecnología y de comunicaciones y transportes, ante una reducción de 94.6 por ciento, pues de recibir 268.1 millones, sólo se plantea destinar 15 millones, indicó.
El 32 Festival del Centro Histórico, por ejemplo, no se realizaría, pues de destinarle 4.8 millones de pesos el año pasado, para 2017 no se consideró un solo peso, de acuerdo con una revisión del proyecto realizada por el Centro de Estudios Económicos del Sector de la Construcción.
Hoy, destacó, el sector registra un crecimiento de 6.4 por ciento hasta el primer semestre, debido al incremento de obras hidráulicas y de saneamiento, de electricidad y telecomunicaciones, y para la conducción de gas, lo cual permitió además generar 19 mil 411 empleos.
El recorte al programa nacional de infraestructura, estimado en 250 mil millones de pesos, sin embargo, impactará de manera negativa al sector, que se encuentra a medio gas
, a lo cual se sumará la inestabilidad en los mercados financieros internacionales con la incidencia negativa en el tipo de cambio, aumentos progresivos en las tasas de interés y crecimiento en los precios de los insumos.
Como sector privado se impulsan nuevos instrumentos financieros, como Fibras o asociaciones público-privadas, para estimular y sustituir la escasez de recursos públicos en el desarrollo de proyectos de infraestructura; además, se promueve una estrategia de estímulos fiscales, indicó.
Mencionó que con ello se busca hacer frente a la reducción de 27.2 por ciento de recursos en términos reales que trae el proyecto de PEF para el próximo año y un posible recorte adicional para el gasto de inversión, al preverse que continuará la inestabilidad y la volatilidad, que inhiben la inversión productiva.