A pesar de que América Latina y el Caribe cuentan con sólidos sistemas de indicadores sobre cobertura, egreso, matrícula y número de docentes, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) alerta que hay escasa información sobre condición de pobreza, discapacidad, acceso a becas y formación para el desarrollo sostenible de los alumnos.

En su informe Disponibilidad de información para el cálculo de los indicadores de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 4-Educación 2030, destaca que si bien se han consolidado los sistemas de datos desarrollados a partir de la década de 1990 –lo que ha permitido disponer en forma general de indicadores actualizados sobre oferta escolar y disponibilidad de docentes– no ocurre lo mismo con lo referente al desarrollo de competencias para los jóvenes y adultos, incluidas las digitales y de alfabetización.

Agrega que en los países de la región los sistemas educativos no cuentan con información suficiente sobre el grado de preparación de los niños antes de ingresar a la primaria. También advierte que hay indicadores cuyos datos aún no están disponibles, pero prevé que se puedan obtener en los próximos años, en particular sobre infraestructura en los planteles y violencia escolar.

Un grupo técnico de la Unesco definió 43 indicadores temáticos que permiten ofrecer información comparable de los sistemas educativos del mundo, a fin de verificar y dar cuenta del avance de las naciones en el cumplimiento de los compromisos de la ODS sobre educación para 2030.

El informe, difundido ayer por el organismo multinacional, destaca que las perspectivas menos alentadoras para el monitoreo se enfocan en el desarrollo de los conocimientos téoricos y prácticos que los alumnos deben alcanzar para el impulso del desarrollo sustentable, ya que se dispone de muy poca información sobre la oferta, enseñanza y aprendizaje del tema.

Además, la Unesco lanzó una alerta por la escasa información que puede ser desagregada para determinar la condición de pobreza y discapacidad de los alumnos. Los países de la región, advirte, aún no han logrado incorporar con éxito mediciones estandarizadas del aprendizaje con estrategias inclusivas, que permitan construir información sobre población con discapacidad.

Por lo que respecta a los datos disponibles sobre docentes, el informe revela que 88 por ciento de los países encuestados tienen información sobre el número de educadores calificados y 75 por ciento sobre aquellos que están certificados, pero sólo 33 por ciento sobre el grado de motivación de los docentes y 41 por ciento para aquellos que son apoyados.