Miércoles 26 de octubre de 2016, p. 35
Las nuevas normas emitidas por el Vaticano sobre la disposición de las cenizas de quienes hayan sido cremados no harán eco entre la mayor parte de la feligresía, consideró Elio Masferrer Kan, experto en asuntos religiosos.
Indicó en entrevista que en definitiva no cambiará la forma de disponer las cenizas. Hay una disminución de las nociones de sacralidad y de la vida eterna. Hay una noción de apropiación privada de los deudos. No existe una percepción generalizada de que tras la cremación, el cementerio o un nicho en una iglesia represente la última morada
.
En vísperas del Día de Muertos, la sede pontificia dispuso que las cenizas no pueden ser esparcidas, divididas ni conservadas en las casas, y deben ser guardadas en un lugar consagrado y aprobado por la Iglesia católica.
Tras insistir en que esta disposición no será popular ni seguida, Masferrer Kan expuso que el papa Francisco está “fuertemente presionado por sectores ultraconservadores muy poderosos, y lo que él hace para legitimarse ante éstos es ceder en medidas dogmáticas“.