Generará energía y reducirá envíos de basura
Viernes 28 de octubre de 2016, p. 36
El Gobierno de la Ciudad de México alista la licitación pública internacional para el diseño, construcción y operación de una planta de termovalorización que permita el procesamiento de 4 mil 500 toneladas diarias de residuos sólidos y su conversión en energía.
Jaime Slomianski, director de la Agencia de Gestión Urbana, explicó que mediante este proceso de incineración limpia
y una planta de biodigestión donde se procesen 2 mil toneladas, cuya licitación se emitirá el próximo año, se busca reducir el volumen de basura que se envía a rellenos sanitarios.
Asimismo, generar la energía suficiente para mover al Metro y atender la demanda del alumbrado público y del Sistema de Aguas, para lo cual se firmará una asociación público-privada a 20 o 30 años, que no significará un ahorro en el pago que realiza el Sistema de Transporte Colectivo o se hace por el manejo de basura, equivalente a 3 mil 900 millones de pesos, pero no vamos a gastar más
, señaló.
El funcionario afirmó en entrevista que la ciudad de México ya no puede seguir enterrando su basura o enviándola a rellenos sanitarios, donde se está a merced de la decisión de las autoridades de recibirla o no; es una problemática aguda la que vivimos y su atención es impostergable
.
Diariamente, se generan 13 mil toneladas de residuos sólidos urbanos, lo que equivale a llenar en un mes el Estadio Azteca de piso a techo o la plancha del Zócalo todos los días, pues la ciudad es una de las urbes que generan más basura a nivel mundial, comentó.
Desde hace 25 años, explicó, no se cuenta con una superficie territorial adecuada para su tratamiento y el cierre del Relleno Sanitario Bordo Poniente, en 2011, llevó a utilizar rellenos privados en los estados de México y Morelos, a donde se envían alrededor de 8 mil toneladas.
En estos momentos, dijo, se analizan tres sitios donde instalar dichas plantas, que requieren, en conjunto, alrededor de 18 hectáreas y podrían estar funcionando en año y medio, por módulos, y de manera integral en tres años; mientras se realizan pláticas con el estado de México para ir reduciendo de manera gradual el envío de residuos a los rellenos de La Cañada y El Milagro, en Ixtapaluca.
La planta de termovalorización podría tratar entre 4 mil 500 y 6 mil 500 toneladas de residuos diarios, mientras la de biodigestión, 2 mil, convirtiéndose en las más grandes del mundo; a lo que se sumarían 2 mil de orgánicos el próximo año en la planta de composta.
Mientras, con la puesta en marcha de la fase II de una planta en Iztapalapa, se tratarán mil 600 toneladas de combustible derivados de residuos, que se entregarán a la industria cementera el próximo año, con lo que quedarían menos de mil toneladas a enviarse a rellenos, puntualizó.