Salvador Nava, Manuel González Oropeza y María del Carmen Alanís, ‘‘trotamundos’’
Lunes 31 de octubre de 2016, p. 3
La segunda integración del tribunal electoral deja a sus sucesores una herencia que remontar sobre el uso suntuario y discrecional de los recursos. Tan sólo en viáticos, los seis magistrados se repartieron 7.7 millones de pesos en 813 viajes, con disparidades evidentes, sobre todo en los periplos al extranjero: en uno efectuado a España, Flavio Galván gastó mil 127 pesos diarios en promedio, mientras Salvador Nava Gomar usó 39 mil pesos en un solo día en Argentina.
Este último, junto con otros dos, fueron una especie de magistrados trotamundos de 2007 a octubre de este año. Manuel González Oropeza estuvo más de un año fuera: 409 días en 191 estancias en las que gastó 2 millones 337 mil pesos; María del Carmen Alanís dedicó 338 días a 150 viajes que costaron un millón 239 mil pesos. Y aunque Nava Gomar tuvo 118 salidas, un número inferior, éstas fueron prolongadas, sumando 344 días y representando un millón 426 mil pesos.
Los menos asiduos fueron el presidente de la sala superior, Constancio Carrasco, con 172 días consagrados a 78 viajes, por un monto de 560 mil pesos; Pedro Esteban Penagos permaneció 246 días en 86 viajes, que significaron 781 mil pesos; el ex magistrado Alejandro Luna Ramos –quien comenzó su gestión en 2005 para sustituir al extinto José Luis de la Peza y concluyó diez años después– acumuló en 92 periplos, 224 días y 876 mil pesos gastados, mientras Galván reunió 234 días en 97 trayectos, con viáticos por 561 mil pesos.
Información de la página de Internet del tribunal
Este análisis se desprende de información contenida en la página de Internet del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Sin embargo, no es posible conocer un desglose que permita ponderar por qué las diferencias de montos entre un magistrado y otro, ni comprobar incluso la veracidad de los mismos o que efectivamente hayan reembolsado al erario 5.4 millones de pesos de los 13 millones que, según el tribunal, les fueron entregados en total.
La Unidad de Transparencia del TEPJF respondió a una petición de información que ese dinero sirvió para cubrir gastos por conceptos de ‘‘alimentación y hospedaje, servicio telefónico convencional y/o tarjetas electrónicas, acceso a Internet, traslados locales (pasajes y taxis), propinas por servicios, tintorería y lavandería’’. Pero explicó que ‘‘no cuenta con una base de datos o con algún tipo de registro’’ que permita conocer la información desagregada.
Tampoco se puede acceder en su sitio web a la liga denominada ‘‘Gastos de representación y viáticos’’, donde podrían conocerse facturas o recibos, como ocurre con contratos o facturas por adquisiciones o prestación de servicios. La Unidad de Transparencia argumentó que su sitio se encuentra en proceso de actualización, para atender requerimientos de la nueva ley de transparencia.
Esta bitácora muestra que hicieron 387 nacionales, 190 institucionales y 235 internacionales. Las estancias más caras fueron dos de Nava Gomar: una de tres días en San Miguel Tucumán, Argentina, por 116 mil 745, de los que devolvió 107 pesos; otra de cinco días en el Mar Muerto, en Jordania, por 105 mil pesos, y una más de Luna Ramos en Nueva York, por cinco días y 96 mil pesos.
El mismo Nava tuvo otras tres estancias en España, por más de 80 mil pesos o cercanas a esa cantidad. Fueron recurrentes las visitas de los magistrados a Venecia, Italia, con el argumento de que es la sede del órgano consultivo de la Unión Europea en materia constitucional.
La más costosa fue de González Oropeza, por un monto de 73 mil pesos en cinco días, mientras Alanís registró una cantidad similar en Londres.
Si bien en su más reciente informe el actual presidente, Constancio Carrasco, planteó que se buscó racionalizar estas erogaciones y se adquirieron boletos de avión con millas acumuladas en favor del tribunal, el desembolso en viáticos durante diez meses suma 434 mil pesos, muy inferior al millón y medio de 2014, cuando se dio el pico más alto, pero más elevado que los 362 mil de 2009.
En opinión de Hugo Concha Cantú, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México, y coordinador del libro La (in)justicia electoral a examen, está bien que los magistrados ganen un buen sueldo (448 mil pesos netos), pero criticó que sean beneficiados con prestaciones de ‘‘jeques árabes’’ consistentes en onerosos viáticos, pago de choferes o de chefs.
De hecho, el presupuesto del tribunal ha crecido de mil 139 millones de pesos en 2007 a 2 mil 265 millones en 2016, si bien su carga de trabajo también se ha incrementado de 2 mil 989 asuntos resueltos a 6 mil 882, de acuerdo con los últimos datos.