La Secretaría de Movilidad estudia reclasificar las avenidas de la Ciudad de México para definir las que serán primarias y secundarias, y determinar la velocidad de circulación; asimismo, inició la validación vehicular de servicios como Uber y Cabify, la cual tendrá un costo de mil 650 pesos para obtener un holograma especial que se deberá colocar en la unidad.

En la puesta en marcha del programa de planeación regional que divide a la capital en cinco zonas, para solucionar los problemas de tráfnsito y transporte, la subsecretaria de Planeación, Laura Ballesteros, adelantó que sí habrá cambios en cuanto al porcentaje de vías primarias contra secundarias.

La velocidad de circulación de 40 y 50 kilómetros fijada para dichas vialidades en el Reglamento de Tránsito, sin embargo, no se moverá, pero nos enfrentamos a que muchos de los problemas de intervención para su mantenimiento o en términos de tránsito se debe a una clasificación incorrecta.

El Comité de Clasificación de Vialidades, formado por las secretarías de Obras y Servicios, de Desarrollo Urbano y Vivienda, de Seguridad Pública y de Movilidad; así como la Agencia de Gestión Urbana, detalló, lleva cuatro meses estudiando la reclasificación de las avenidas, para hacer los ajustes correspondientes.

Tras la firma de un convenio con la Universidad Panamericana, que ayudará a elaborar iniciativas en materia de movilidad, seguridad vial y transporte, señaló que se formará un banco de proyectos que permitan atender los problemas de congestión que se tienen en la ciudad.

Por ello la decisión de dividirla en cinco zonas: poniente-centro, poniente-Santa Fe, oriente-Iztacalco, sur-centro y sur-Xochimilco, donde se buscará también la colaboración de universidades y vecinos en los proyectos a impulsar, dijo, y señaló que este año se iniciarán los exámenes para quienes obtengan por primera vez la licencia de conducir.

Por otra parte, a 15 meses de anunciarlo, la Semovi inició la validación vehicular, documental, de identidad y seguridad del servicio privado de transporte con chofer, por medio de aplicaciones y plataformas informáticas, a fin de garantizar la seguridad de los usuarios.

De no aprobar, se emitirá una carta de rechazo donde se especificarán los motivos y tendrá la oportunidad de presentarlo por segunda vez sin costo alguno, pero de no presentarse, el trámite se cancelará, volverá a pagar y quedará inhabilitado para prestar el servicio.