La repatriación de niños mexicanos procedentes de Estados Unidos aumentó en septiembre pasado más de 300 por ciento respecto del mes anterior, al pasar de 113 a 438 casos de menores de 11 años de edad.

A escala general (menores de 18 años y adultos) el retorno forzado de connacionales aumentó 6 por ciento este año respecto de los primeros nueve meses de 2015.

Si bien hay un descenso marcado de una década a la fecha, durante la administración de Barack Obama aumentaron los casos de repatriaciones de personas con mayor antigüedad y relaciones laborales y familiares en el vecino país.

En 2005, Estados Unidos repatrió a 536 mil 767 connacionales; en esa época se inició el programa de devolución ordenada y segura. En 2010, ya con el gobierno de Obama, se registraron, tan sólo en ese año, 469 mil 268 deportaciones. En 2015, la cifra se ubicó en 207 mil 398.

Durante el periodo enero septiembre de 2016, la cuenta va en 164 mil 433, de los cuales 9 mil 440 son menores de 18 años (la mayoría de esta categoría fueron devueltos solos, sin la compañía de un familiar adulto) y, de éstos, mil 95 tenían menos de 11 años.

Aquí el retorno forzado fue hecho mayoritariamente con la compañía de un familiar; sin embargo, el gobierno estadunidense concretó 133 repatriaciones de niños menores de 11 años, a quienes mandó a México solos. Lo anterior pese a que la mayoría de los pequeños son originarios de Guerrero, Michoacán, Oaxaca y Chiapas.

Lo anterior, acorde con cifras de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación.

Organizaciones civiles e instancias gubernamentales han advertido desde 2012 acerca del aumento de deportaciones selectivas o con enfoque de presuntos antecedentes criminales de los mexicanos devueltos.

Al mismo tiempo, creció el cinturón de seguridad. En 2015 había 3 mil 555 agentes de la Patrulla Fronteriza; cinco años después, esa cifra había llegado a 17 mil 535, y para la mitad de 2013 el número ya había rebasado los 21 mil (La Jornada 25/6/13).