Los gobernadores de los estados de México, Eruviel Ávila, y de Chihuahua, Javier Corral, anunciaron medidas extraordinarias ante la posibilidad de que el gobierno de Estados Unidos realice deportaciones masivas de mexicanos una vez que Donald Trump asuma el gobierno.

Al igual que el mandatario de Jalisco, Aristóteles Sandoval, Ávila y Corral anunciaron viajes a ese país para establecer un programa de comunicación, cooperación y protección a sus derechos.

En cambio, los mandatarios de Guanajuato, Miguel Márquez, y de Sinaloa, Mario López Valdez, pidieron no generar sicosis y descartaron que Trump vaya a cumplir sus amenazas.

El gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval, descartó una deportación masiva, aunque anticipó que funcionarios de su gabinete y él mismo estarán de visita en ese país para ponerse en contacto con las organizaciones de jaliscienses y garantizar las inversiones conseguidas de empresas estadunidenses para el estado, especialmente las de Silicon Valley, en California.

Su homólogo de Guanajuato, Miguel Márquez, comentó que el triunfo de Trump no debe generar sicosis. Para el presidente electo ‘‘ahora viene el sentarse a revisar los acuerdos, los convenios internacionales, donde hay cosas favorables para Estados Unidos y otras que tal vez no, igual para México’’.

El gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, descartó que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte vaya a ser modificado, ‘‘ya que eso implica un proceso muy largo de negociación y la intervención de las legislaturas de los tres países (asociados)’’.

(Israel Dávila, Miroslava Breach, Juan G. Partida, Carlos García y Javier Valdez)