El brutal recorte de más de 50 por ciento al presupuesto 2017 del sector indígena generará enorme convulsión social en las áreas rurales del país, afirmaron organizaciones y comunidades de pueblos originarios, ya que con el ajuste aprobado por la Cámara de Diputados se concreta el peor de los escenarios para uno de los sectores más pobres, marginados y vulnerables de la sociedad mexicana.

El presupuesto de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, que este año fue de 11 mil 900 millones de pesos, se recortó a 5 mil 800 millones, lo cual deja a este organismo en total parálisis, explicaron.

En conferencia de prensa, Carlos de Jesús Alejandro, de la Asamblea Nacional Indígena Plural por la Autonomía, señaló que a este drástico recorte se suma el del presupuesto que se ejerce de manera transversal para el sector por 16 dependencias, que pasó de 85 mil millones de pesos a 74 mil millones.

Sin embargo, dijo que estos recursos ni siquiera llegan a las comunidades y pueblos indígenas, pues se queda en otras áreas, como ocurre con la Secretaría de Agricultura, que ha llegado a utilizarlos para el campo, pero no para los indígenas.

Anunció que dadas las circunstancias, valoran acciones no sólo jurídicas, sino también movilizaciones pues la situación se prevé sumamente complicada.

Dijo que el Ejecutivo, con su propuesta de presupuesto, y el Legislativo, al aprobarla prácticamente sin cambios, demostraron el enorme desprecio que sienten por los indígenas, condenándolos a permanecer en pobreza y marginación.